Más de cincuenta personas escenificaron en la iglesia de Celanova, desde las 12 a las 13.30 horas, la Última Cena de Jesús con los apóstoles, la prisión en el Huerto de los Olivos, su conducción ante las autoridades, la petición de muerte para el Señor, el lavado de manos de Pilatos, los azotes, la conducción al Calvario, las tres caídas y la crucifixión.
Realizó el papel de Cristo el abogado Álex Vid. Permanece como responsable de la representación Alfredo Vázquez Dorado, que ha llegado a la edición número 27 (la primera se hizo en 1992). La afluencia de feligreses a la iglesia fue tan importante, que algunas de las personas asistentes tuvieron problemas para contemplar la representación.
Hasta ahora, la parroquia de Celanova utilizaba trajes de judíos cedidos por los organizadores de la Festa da Istoria de Ribadavia y de soldados romanos de la Festa do Esquecemento de Xinzo. Este año compraron cinco trajes de soldados romanos completos.
La Procesión del Santo Entierro tuvieron que hacerla en el claustro barroco debido a la lluvia. La apertura la realizó la talla del Niño Jesús de Praga, seguida por el Ecce Homo del siglo XVIII, la Crucifixión, con el Cristo del siglo XVII, y el Santo Entierro, con la urna de Cristo que llevan a hombros los portadores y realizan elevaciones, para que la gente la vea mejor. Cierra La Dolorosa, el paso que tiene mayor número de cofrades.
Realizaron el enclavo a las 19.15 horas, tras lo que vino el desenclavo, con su correspondiente sermón. La procesión empezó a las 19.50 horas.
