El portavoz del gobierno popular, José Araújo, reconoce que la situación actual es "complicada", aunque siguen pensando que es posible que se pueda conseguir alcanzar un acuerdo en aquellos asuntos claves para la ciudad, como es la aprobación de los presupuestos y el nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM). Gobernar en minoría, sin pactos estables y con enfrentamientos habituales con los que pueden apuntar esa mayoría necesaria, no es el mejor de los escenarios.

Pero Araújo asegura a FARO que aún es posible un acuerdo con Democracia Ourensana, sobre todo después de lo que aconteció en el pleno que se celebró el viernes, en el que rechazaron las dos propuestas que puso sobre la mesa Pérez Jácome y que abrirían la puerta a ese acuerdo que permitiría al PP poder aprobar sus primeros presupuestos, los de 2018, y evitar consumir el mandato con los prorrogados de 2014.

"No descartamos a DO, al igual que otros grupos, para poder llegar a acuerdos", dice Araújo, y reconoce que la negativa a la rebaja del 40% del impuesto de vehículos y a la compra del complejo deportivo Bamio se sustentó en la necesidad de "analizar las cuestiones". Y recriminar al portavoz de DO que "funcione con amenazas, más que con propuestas".

Y en un intento de reconducir la situación, sobre todo después de que el portavoz de DO anunció que al "no superar la prueba del algodón", con la aprobación de esas dos propuesta, cerraba la puerta a cualquier tipo de negociación, Araújo izo un nuevo intento de acercamiento. Y señala que "pasamos por alto las arroutadas de Jácome e intentaremos llegar a acuerdos", además de reconocer que cuando se gobierna en minoría "se tienen que tragar muchos sapos".

Pero más allá de esos enfrentamientos, como los del pasado pleno, con cruce de acusaciones entre Jácome con la edil de Hacienda, Ana Fernández Morenza, y el propio alcalde, Jesús Vázquez, y que el portavoz popular circunscribe en el debate político, reconoce que DO es el único que planteó propuestas y tuvo voluntad de dialogo.

Sobre todo en una situación muy difícil, como fue la de aprobar una modificación de crédito para el área Social, con un desfase de 1,6 millones de euros. El acuerdo se selló al aceptar el gobierno una rebaja del IBI del 20% en dos años. " Y se lo agradecimos públicamente", y denunciamos la "irresponsabilidad" de los otros dos grupos de la oposición, PSOE y Ourense en Común.

En lo que incide José Araújo es que la disposición de dialogo pasa por alcanzar "acuerdos realizables", y rechaza que antes de negociar se "amenace con altavoces", y pretender "imponer" determinadas cuestiones que pueden dejar al Concello sin ingreso, que sólo e pueden obtener por la vía de un nuevo planeamiento urbanístico.

Con el mensaje que el actual gobierno "está permanentemente en jornadas de puertas abiertas a la negociación", Araújo señala que "está todo por ver" en lo que se refiere al futuro de los presupuestos y el PXOM, pero evita cargar las responsabilidades en los grupos de la oposición, a los que reclaman una apuesta por el dialogo y buscar ese consenso para poder sacar adelante la ciudad.