Hay cosas que no cambian en cuestión culinaria, y al margen de la nueva cocina, lo que manda en los fogones de la provincia es un buen cordero o cabrito en las mesas navideñas. Al menos eso demostraron ayer los "top ten" de las ventas de Nochevieja, No faltaron las largas en las carnicerías, en especial en las de la Plaza de Abastos de As Burgas, donde los precios, según el presidente de los comerciantes, Emilio Pedro González "son similares ayer y hoy a los de Nochebuena. La estrella es el cabrito a 17, 90; el cordero a 13,90 y la de ternera a igual precio que el resto del año.

La diferencia de la plaza con otros proveedores explica que "se identifican claramente sin ningún tipo de trampa cuál es la carne de cabrito de la de cordero, con un etiquetado de color diferenciado que no se puede despegar en el que figura el número de lote y fecha de matanza, es decir que aquí no hay trampas", indica González.

Afirma que la calidad marca también los precios y la cola "buena parte de la producción viene de Xinzo porque los pastos son son más verdes y pese a la fama que tiene el cordero castellano esta carne de aquí tiene menos subida en el sabor", aclara.

Ese año no se vendió menos cochinillo "porque había que venderlo 25 euros el kilo, algo excesivo y luego no puedes competir con algunas grandes superficies que presentan precios bajísimos pero en productos descongelado y de Finlandia".