Un hombre de 83 años de edad ha aceptado una pena de un año de prisión por un delito de tenencia ilícita de armas. La policía encontró una pistola en posesión del acusado, que carecía de licencia, durante un cacheo realizado tras una discusión con un vecino en la que se disputaban la propiedad de una finca.

Según el relato de los hechos, el acusado habría sacado el arma de fuego que llevaba en el bolsillo de la chaqueta, para, supuestamente, intimidar al hombre con el que mantuvo el altercado.

Los hechos sucedieron en febrero de 2016, en la localidad de Videferre, situada en el concello de Oímbra. Una pelea durante la que los dos involucrados se habrían agredido mutuamente, con intención de menoscabarse sus respectivas integridades físicas.

Así, el octogenario habría golpeado primero a su vecino, con el que mantenía malas relaciones, con un paraguas que llevaba en el brazo. Para después, proceder supuestamente a amenazarlo con una pistola. Un golpe que su oponente le devolvió también utilizando el mismo instrumento, llegando a herirlo en un oído, mediante una laceración superficial en el pabellón auditivo, y el abdomen.

La Fiscalía pedía para ambos un delito leve de lesiones, y también un delito de amenazas grave y tenencia ilícita de armas para el iniciador del episodio violento.

Finalmente, el acusado ha aceptado la pena de prisión por tenencia ilícita de armas, ya que los agentes de la policía comprobaron al cachearlo el día de los hechos, que portaba una pistola y un cargador de balas.