Corría el año 1809 y eran malos tiempos para los vecinos de la parroquia de Pazos de Arenteiro, en Boborás, y también para el resto de los españoles. Las tropas francesas de Napoleón campaban a sus anchas por todo el territorio, conquistándolo y sometiendo a la población a saqueos constantes, en su avance hacia Portugal.

Hartos de que los soldados a cargo del mariscal Soult penetraran en la aldea cada vez que les venía en gana para robarles sus reservas de vino y su dinero, los habitantes de Pazos decidieron hacerles frente. "Los esperaron del otro lado de la Ponte da Cruz y los combatieron con lo que pudieron, hoces, mosquetones, hasta piedras, y ese enfrentamiento es precisamente lo que recrearemos el domingo 20 de agosto", explicaba Rebeca Carreiro, coordinadora de la fiesta de recuperación histórica "A Batalla". Una iniciativa que se celebrará en esta parroquia situada en pleno corazón del Ribeiro el próximo mes, organizada por Sustinea y con el propio ayuntamiento y la Deputación provincial como promotores.

Una fiesta en la que los descendientes de aquellos héroes de la Guerra de la Independencia, serán esta vez los protagonistas, convirtiéndose, por un día, en actores y actrices. "Todos los participantes involucrados son vecinos de la zona" explicaba Patricia Torres, concelleira de cultura de Boborás, "y ya llevan dos meses ensayando para que todo salga bien", aseguraba. La participación es muy activa y "la gente está encantada", coincidían en afirmar Rebeca Carreiro y Patricia Torres. Si bien es verdad, la edil de cultura reconocía que harían falta algunos voluntarios más para engrosar el batallón francés, invitando así a cualquier interesando a anotarse en el concello.

Pazos de Arenteiro retrocederá en el tiempo 208 años y lo hará de igual modo la decoración de sus casas y las vestimentas de sus habitantes, que se caracterizarán para la ocasión. Para completar la ambientación, Sustinea instalará un campamento napoleónico que habitarán 15 soldados. El resto del programa festivo lo componen actividades de teatro y música de calle, danza, foliada, regueifas o monólogos.

Un evento que desde el concello esperan que "despierte la curiosidad de la gente y logre alta participación", lo que le permitiría cumplir su vocación de permanecer en el tiempo, y pasar a formar parte del calendario estival de fiestas de la provincia de Ourense.