Nicolae G. tenía prohibido acercarse a menos de 200 metros de su pareja, así como comunicarse con ella por cualquier medio. No obstante, nada más ingresar en el centro penitenciario de Pereiro de Aguiar, el 20 de abril de 2017, pidió hacer una llamada y la destinataria fue la mujer. Ayer fue a juicio rápido como responsable de un delito de quebrantamiento de condena. Se confesó autor de los hechos y aceptó un acuerdo de conformidad con la Fiscalía. El pacto rebaja la pena, desde el año de prisión al que se enfrentaba, a 9 meses, al final.

El individuo fue condenado el 30 de marzo de este año por el juzgado de Instrucción 3 de Ourense. La magistrada de Violencia de Género le impuso 4 meses de prisión. Otra resolución del mismo tribunal, dictada el pasado mes de abril, volvía a condenar al encausado por el mismo delito machista. En esta segunda ocasión, la juez le impuso 6 meses.

La última sentencia y un auto de medidas cautelares de marzo, dictado por Instrucción 1, le prohibían acerarse a su pareja o comunicarse con ella. El 20 de abril, a las 15,45 horas, la telefoneó desde el departamento de ingresos de la cárcel ourensana.