La Cámara de Comercio de Pontevedra, Vigo y Vilagarcía pueso en marcha en febrero de 2005 su vivero de la urbe olívica con capacidad para 19 empresas y de los que actualmente hay 17 ocupados. Ha llegado a tener lista de espera, pero en estos momentos hay dos vacantes. Estos proyectos de iniciativa pública eran la plataforma más accesible para quienes optaban por el autoempleo hasta que empezaron a surgir en la ciudad los espacios de trabajo compartido de iniciativa privada.
Ernesto Maseda y Borja González pusieron en marcha GrinaGa en julio de 2016 y entraron en el vivero de la Cámara de Comercio en noviembre porque les ahorraba gestiones y gastos. "Una semana presentamos el plan de negocio y a la siguiente estramos con todo operativo. Fue inmediato", destacan los responsables de esta firma de ingeniería, quienes reconocen que los 200 euros que pagan lo convierte en una opción "más que atractiva". "Es céntrico y te permite centrarte solo en tu negocio", explica Maseda. La firma que aún no cumplió un año de vida ofrece soluciones de ingeniería y gestión de proyectos de un modo flexible y eficaz. Proveen conocimientos técnicos a grandes firmas con capacidad de fabricación propia o bien facilitan maquinaria específica adaptada ya a las necesidades de una empresa. Trabajan para el sector terciario, naval y la industria en general por ahora centrados en Galicia.
