El campus de Ourense y su proyecto de especialización Campus da Auga ha arrancado con normalidad un curso muy relevante para la Universidad de Vigo que el propio rector, Salustiano Mato, calificó de "histórico". Es el primer año de implantación del grado de Ingeniería Aeroespacial, un título exclusivo en Galicia que ha reunido a 50 de los mejores expedientes académicos. También será el año en el que se resuelva la tramitación del programa de doctorado Auga, Desenvolvemento e Sustentabilidade que prevé su arranque en el curso 2017-2018, un título específico en el que se han implicado más de 100 investigadores del campus. En paralelo, las obras de la que será la sede institucional del Campus da Auga comenzaron hace un mes.
-Son muchas las novedades pero el curso comenzó con el foco puesto en el nuevo título de Ingeniería Aeroespacial que arranca con aparente normalidad.
-Es la gran novedad en todo el sistema universitario de Galicia. Un título en el que trabajamos muchísimo y en el que nos implicamos todo el equipo de gobierno. Las cosas se hicieron muy bien y aquí estamos con un nuevo centro y una nueva titulación. Las clases se están desarrollando normalmente y como ocurre en la implantación de cualquier titulación no todo va a salir perfecto porque es imposible. A lo largo de los cuatro años de implantación habrá que ir adaptando infraestructuras para responder a las necesidades del curso en el futuro, incorporando docentes y equipamiento.
-El Consello Galego de Universidades todavía no ha aprobado la creación del centro. ¿Hay fecha para la reunión?
-No me consta, de todas formas es un trámite meramente formal que para nada afecta al desarrollo de los estudios ni al título. En el momento en que tengamos el papel que diga que está creado el centro mejor para todos, pero eso no va a afectar para nada.
-El título ha generado grandes expectativas fuera de la Universidad, ¿supone esto un plus de responsabilidad para la vicerrectoría?
-Sí, muchísima responsabilidad, está claro. Si se implanta aquí es desde luego porque se identifican factores y elementos económicos, empresas instaladas que producen en ese sector que demandan titulados formados en esa área de conocimiento. Nosotros tenemos un sentido de responsabilidad para responder adecuadamente a esa demanda y esperamos ser un motor para fomentar dentro de nuestras posibilidades una transformación en los modelos productivos, pero no solo en el sector aeronáutico en sentido estricto y empresas que se dedican a la producción de material para aviones. En Galicia, sobre todo en el eje Vigo-Ourense, hay una industria muy importante vinculada al sector de la automoción pero también al sector naval, sobre todo en el área de Vigo, que necesariamente va a tener que avanzar y readaptarse si quiere sobrevivir. Por lo tanto, hay que abrir nuevos focos y lugares de producción. Este es uno de ellos y tiene futuro, tiene un recorrido en España mayor del que puede tener en otros países europeos. Nosotros tratamos de apoyar y fomentar el desarrollo de ese sector incipiente. Lo hicimos primero con grupos de investigación en picosatélites, con titulaciones de prestigio en España como Telecomunicaciones, Ingeniería Industrial o Informática en Ourense, y ahora sumamos con otra titulación de referencia.
-¿Ha dicho que el programa de doctorado supone un hito extraordinario para el campus. ¿Por qué?
-Va a suponer una mejora enorme, un impulso a la especialización y de nuevo viene a cristalizar el sentido de colaboración y la apuesta por la especialización de los docentes. Hay más de 100 investigadores que se anotaron al programa diciendo que están dispuestos a participar como directores de tesis. Son investigadores de todos los ámbitos del conocimiento de las seis facultades. Los mejores que tenemos lo respaldan con su presencia y su curriculum. Más no se pude decir, estoy contento y muy satisfecho.
-¿Qué supondrá para Ourense una actividad investigadora de este nivel?
-Se ofertan 25 plazas que es un número interesante. Lo que se pretende es desarrollar investigación vinculada al agua, el medio ambiente, desarrollo sostenible... Hay multitud de líneas de investigación que en función de las tesis que se orienten podrán aprovechar de forma directa o indirecta el territorio más próximo. Desde el punto de vista de la explotación turística, la actividad ganadera, agraria, nuevos cultivos, la producción hidroeléctrica, el termalismo...
-El territorio es una provincia muy envejecida, despoblada y con poco peso industrial. ¿Choca esto con el proyecto de la Universidad?
-Esa realidad tiene que ser objeto de estudio, sobre todo para dar respuesta a las necesidades de la población. Este programa no se puede quedar en una cuestión meramente pasiva, en ver como sucede esto, como envejece la población y se desindustrializa el territorio. De ahí saldrán propuestas para revertir esa situación. Ahora bien, tampoco se pude pensar que un programa de doctoramiento es una política pública de resolución de problemas. Puede haber estudios y tesis que se hagan ahí que tendrán aplicación en la provincia y otras que no, que tratarán problemas universales en función del ámbito científico en el que se encuentren.
-El agua como eje temático y un plan termal en Ourense sin ejecutar. ¿Se ve frenado el Campus da Auga?
-Nuestra función es proponer, nosotros no ejecutamos políticas públicas. ¿Qué proponemos? Conocimiento, investigación y estudio. Ese es nuestro papel en la sociedad y estamos a disposición de las administraciones públicas y de la empresa privada para analizar y ver posibles soluciones, y para formar a personas para que puedan gestionar adecuadamente los recursos. Las administraciones más próximas y la autonómica entienden el papel que nos corresponde y nos apoyan. Nosotros siempre vamos a pedir que se tire más de la Universidad porque puede ser motor de cambio.
