La sequía del verano menguó la uva de la D.O. Monterrei pero ganó en calidad

Crego e Monaguillo, situada en Salgueira de Monterrei, y Castro de Lobarzán, emplazada en la localidad de Vilaza, han sido las primeras en iniciar la recolección de la uva, empezando por la variedad godello. El Consello Regulador espera que a finales de la próxima semana se incorporen todas las demás bodegas, un total de 25.

El director técnico de la D.O., Luis Miguel López, destacó en la primera jornada de la vendimia las buenas expectativas de los viticultores respecto a la calidad de la uva este año y explica que el estado fitosanitario es "muy bueno" debido a las escasas precipitaciones registradas durante la fase de desarrollo del fruto. "La sequía hace que la uva sea más pequeña, pero la relación de superficie de piel por litro de mosto es mayor, lo que conlleva más calidad", indica.

En este sentido, los fenómenos meteorológicos adversos de este año se han aliado a favor de las uvas de la D.O. Monterrei. Por un lado, las lluvias intensas de la primavera fueron en parte negativas porque favorecieron la aparición de enfermedades como el mildiu, y esto repercute en la cantidad, reduciendo la producción. No obstante, la sequía y las altas temperaturas que vinieron después frenaron el avance de estas enfermedades.

Además, la ausencia de precipitaciones en todo el verano no supuso un problema para la vid porque, explica, Miguel López, "las lluvias de la primavera aumentaron las reservas hídricas para que la planta dispusiese de agua; visto el verano seco que vino, habría sido desastroso sin esas lluvias", añade.

También fueron favorables las precipitaciones registradas el pasado martes en la comarca, y no solo para apagar los incendios que estaban afectando duramente a la zona y que, de hecho, provocaron pérdidas importantes en algunas parcelas en Oímbra y Monterrei, sino porque "limpiaron el polvo" de la uva, indica el director técnico del Consello Regulador.

Con todo, la vendimia arrancó con la recogida de las variedades blancas, empezando por la uva godello, que es la más abundante en la zona, y la dona blanca. En tintas la primera que se corta es la mencía, que es también la variedad más extendida en la zona vitivinícola de Monterrei. Luis Miguel López explica que esta variedad ha adelantado su maduración en los últimos años "motivada por la edad de las cepas y los menores rendimientos" de la vid. "Si la planta abastece a menos racimos se adelanta la maduración", apunta el técnico. Este adelanto provoca que la vendimia de godello y mencía llegue a coincidir en el tiempo, algo que antes no ocurría.

Por otro lado, los 11 técnicos que colaboran con la D.O. Monterrei en la presente campaña ya han comenzado su labor inspectora. Los miembros de este equipo recibieron esta semana formación específica sobre las variedades de uva presentes en Monterrei en las instalaciones del Consello Regulador y en las de la EVEGA. Los 11 técnicos cuya contratación autorizó el pleno del consejo se encargarán de realizar trabajos relacionados con la ordenación y control de la viticultura en la comarca.

Monterrei es la penúltima de las cuatro D.O. ourensanas en iniciar la vendimia. La más madrugadora fue la de Valdeorras, que empezó el lunes con la previsión de recoger entre un 10 y un 30% menos que el año pasado, en el que se lograron 6,5 millones de kilos.

O Ribeiro la inició al día siguiente, el 13, también marcada por una reducción previsible del 10%, lo que supone conseguir 13 millones de kilos, lo que supondría una producción de 9,1 millones de euros.

La última en incorporarse es la Ribeira Sacra, que oficialmente inicia la vendimia el próximo día 22, aunque algunas bodegas de la zona de Manzaneda y algunas de forma puntual en Amandi han recogido ya parte de la uva.