"Le echarán la culpa a la herencia recibida como acostumbran para justificar su descontrol y desgobierno", vaticinaba ayer Francisco José Fraga, portavoz de los socialistas del concello de Piñor tras hacerse público que este municipio no ha cumplido con los principios de estabilidad presupuestaria a los que obliga la ley, ni con la regla de gasto, por lo que quedará bajo la tutela financiera de la Xunta. "Pero es fácil desmontar este argumento, la liquidación del año anterior, realizada por el gobierno socialista cumplía con estas premisas", prosiguió.
"Esto no lo digo yo, si no las cifras", aseguraba al exponer que su ejecutivo habría finalizado 2014 con "un resultado presupuestario positivo, así como con un remanente de tesorería de 90.000 euros". Situación contraria a la actual en la que el municipio habría contraído, según fuentes de la oposición, un déficit de 140.000 euros, así como también un saldo negativo en la tesorería. Además de "haber cuadriplicado" el período medio de pago a proveedores, que se elevaría desde los 27 hasta los 100 días.
Además de lo que Fraga define como "una carrera de gasto descontrolada hacia ninguna parte", el portavoz también ha denunciado la actitud de "dejadez" del actual gobierno con respecto a los servicios mínimos. "Los contenedores rebosan de basura, las cunetas todavía no se han limpiado a pesar del riesgo de incendio y los vecinos de Marañís llevan más de un mes sin agua de la traída", enumeró el socialista.
