La pasarela peatonal de Oira contará con iluminación nocturna cinco años después de su apertura. Esta infraestructura, que completó en julio de 2011 el circuito circular por las sendas peatonales del río Miño a su paso por la capital, carecía de luz pública, lo que suponía un riesgo para los usuarios. El gobierno local aprobó ayer en una junta de gobierno extraordinaria el convenio que permitirá ejecutar las obras de iluminación. Se trata de una intervención que precisa una inversión de 59.915 euros que serán financiados íntegramente por la Xunta, a través de la Axencia Galega de Infraestruturas.
La pasarela es transitada diariamente por multitud de personas que disfrutan de estos paseos fluviales, pero con el inconveniente de que solo puede ser utilizada en las condiciones apropiadas de accesibilidad durante el día. Según informó ayer el gobierno local al término de la junta extraordinaria, el proyecto de iluminación da cumplimiento tanto a la normativa estatal como a la autonómica en materia de accesibilidad de espacios públicos y de supresión de barreras. Según marcan estas directrices, es preciso abordar esta actuación ajustándose a los requerimientos de iluminación "que garanticen su utilización autónoma, segura y con comodidad para todas las personas".
Las obras consistirán básicamente en la instalación de proyectores led a lo largo de la pasarela, de forma que permitan mantener los niveles exigidos de iluminación. La intervención también tendrá en cuenta la estética y la propia personalidad de la infraestructura, ya que acentuará su recorrido curvo y sus tirantes de acero. Por su parte, la iluminación del acceso a la pasarela se realizará mediante balizas de acero diseñadas para facilitar su mimetización con el entorno fluvial.
La inversión será asumida íntegramente por la Axencia Galega de Infraestruturas de la Xunta. En su caso, el Concello de Ourense autorizará las obras, cediendo los terrenos necesarios para su ejecución. Asimismo asumirá la titularidad de las instalaciones de alumbrado ejecutadas por la agencia, así como su explotación, mantenimiento y conservación.
Esta pasarela cerró en 2011 el circuito peatonal por las riberas del Miño. En el extremo opuesto está la infraestructura de Outariz, construida en colaboración con el Estado a partir de un convenio firmado en 2003.
