La Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) mantiene contactos con el Concello de Ourense para ensayar en el tanque de tormentas o aliviadero que se encuentra en el río Barbaña, cerca de la desembocadura, antes de llegar al Pabellón de Os Remedios, un nuevo dispositivo mecánico que impida que las pequeñas partículas contaminantes que arrastran las aguas pluviales en los primeros 20 minutos de una tormenta, por la presencia de papeles, colillas, aceite y grasa, vayan al cauce fluvial.

Los cinco o seis tanques de tormenta o aliviaderos que se colocaron junto al río Barbaña, hace unos doce años, no disponen de ese dispositivo, porque la legislación no lo exigía, pero en cambio ahora sí está contemplado. Por lo tanto, la CHMS va a colocar un dispositivo de retención de partículas contaminantes en el tanque de tormenta que se encuentra junto al pabellón de Os Remedios, de forma experimental. Posteriormente lo hará en los demás aliviaderos. La colocación de estos dispositivos requiere un desembolso de unos 60.000 euros, por parte de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, para cada tanque de tormentas. La actuación completa supera los 300.000 euros.

El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, Francisco Marín, se ha reunido recientemente con el concejal de Infraestructuras, José Araújo, para conveniar esta actuación, porque la red de aliviaderos "la colocó la Administración central, pero la explota el Concello de Ourense". También hablarán con Viaqua, la empresa encargada de realizar la depuración de aguas, para que de su visto bueno. La actuación será financiada por la CHMS.

La Confederación Hidrográfica Miño-Sil tiene previsto firmar otro convenio con el Concello de San Cibrao das Viñas para la colocación de un sistema automático que active la apertura del tanque pulmón que hay en el recinto de la estación depuradora del referido municipio -hasta ahora funciona de forma manual-, cuando se produzca un vertido químico, como ocurrió en el año 2009, provocando la mortandad de 19.000 peces en el río Barbaña. Requiere una inversión de 40.000 a 50.000 euros, que la CHMS financiará al 50%.

La colocación de este dispositivo tiene como finalidad que cuando se produzca un vertido químico, se desvíe hacia el tanque pulmón, para que no llegue a la depuradora de San Cibrao das Viñas, dado que podría desbordar su capacidad de trabajo y afectar a la fauna y flora del resto del cauce del río, como ocurrió en el año 2009.

La Confederación Hidrográfica Miño Sil permanece a la espera de la llegada de 15 millones de euros, procedentes de fondos europeos, para mejorar el cauce del río Barbaña. Pero mientras tanto va realizando pequeñas actuaciones, para paliar la situación.

Proyectos europeos

Por otra parte, la Confederación Hidrográfica Miño Sil ha presentado al Programa Operativo de Cooperación Transfronteriza de España y Portugal de la Unión Europea, con el 75% de financiación europea, dos proyectos, que previsiblemente se resolverán en noviembre o diciembre de este año. El primero, con un presupuesto de 2,7 millones de euros, lo hemos presentado de forma conjunta con el Campus da Auga de la Universidad de Vigo, la Confederación Hidrográfica del Norte de Portugal y la Universidad de Oporto, denominado Risk Miño-Limia. Tiene como objetivo prepararnos ante fenómenos extremos, como las sequías y las inundaciones.

Francisco Marín resalta que este tema "no puede estar más de actualidad, por lo que está pasando con las inundaciones de París". Y recuerda que el año pasado, "aquí estuvimos en prealerta por sequía, y ahora no para de llover".

Francisco Marín está convencido de que la Unión Europea aprobará los dos proyectos que ha presentado la Confederación Hidrográfica Miño Sil, "porque se trata de actuaciones muy fundamentadas, y además hay un eje específico para esto, dentro de la convocatoria, para prepararse ante los fenómenos meteorológicos extremos".

El presidente de la CHMS explica que este proyecto "no lleva nada de hormigón, ni de tuberías ni de cosas de estas. Todo se va a invertir en conocimiento, en formación, en estar preparados, mediante el estudio de nuestra red hidrográfica, contar con indicadores propios para las situaciones de prealerta, de alerta o de emergencia, en el caso de sequía. Hay que realizar esos estudios aquí, porque eso va a suponer hacer restricciones o no hacerlas".

También incorporarán programas informáticos que permiten realizar un pronóstico sobre el nivel de inundación que va a sufrir un concello como Ribadavia, por ejemplo, cuando se produce una precipitación de cien litros de agua por metro cuadrado en una zona determinada.

El segundo proyecto, con un presupuesto de 3,2 millones de euros, denominado Raia Termal, tiene como finalidad mejorar los entornos fluviales, en los municipios portugueses y españoles que cuentan con aguas termales.