A los pocos días de que el fiscal jefe de Ourense archivase la primera denuncia contra José Manuel Baltar por parte de una mujer que lo acusaba de haberle prometido un trabajo fijo en la Diputación a cambio de sexo, la particular acudió al juzgado de guardia para trasladar su acción a la vía de la instrucción. Cuando presentó el escrito se encontraba en funciones de guardia el Número Dos. La sede remitió la documentación al decanato y el servicio de entrada la ha turnado por reparto para que un juez dilucide si hay indicios de delito.

Las denuncias pueden recaer en cualquiera de los tres órganos de instrucción de Ourense, a diferencia de las querellas, que solo asumen el Número 1 y el 2. En el caso de la denuncia contra el presidente de la Diputación, la competencia corresponderá al Número Tres, la sede que lleva los casos de Violencia contra la Mujer. Así lo aseguraba ayer el Tribunal Superior de Xustiza (TSXG). El caso aún no ha sido numerado.