El complejo entramado urbanístico que padece el urbanismo local, tras la anulación hace cuatro años de su plan de urbanismo, vuelve a rizar el rizo, pero esta vez sin salirse de la ley. El Concello ha levantado la "veda" de suspensión de licencias y si la petición es legal, se podrá volver a edificar en la ciudad, al amparo del PXOM de 1986 y por tanto en algún caso en solares que, al amparo del próximo plan de urbanismo en fase de tramitación, ya no serán edificables. Es decir que muchos particulares si se apuran, podrán sacar rentabilidad a terrenos que en breve no tendrán valor urbanístico alguno.
No se descarta que este curioso entre acto entre la anulación de un plan y la aprobación de otro, genere un aluvión de peticiones para buscar salida a terrenos, en especial en el rural, el más restrictivo en materia edificatorias. Pero las administraciones quieren ver grúas en medio de la sequía edificatoria.
Desde el día 1 de diciembre se puede volver a solicitar licencia de construcción en el Concello, después de que estuviera parada su concesión oficialmente durante dos años, por imperativo legal de la Ley del Suelo y Urbanismo de Galicia (Louga), pues tras la aprobación del PlanXeral de Ordenación Municipal de 2013 (PXOM) y ese que esa misma ley del suelo establece la paralización de licencias durante un máximo de dos años, desde el momento en el que se aprobó inicialmente un plan de urbanismo, como ocurrió el 24 de noviembre de 2013.
Al carecer Ourense de un plan de ordenación aprobado, el que está en vigor es el de 1986, por lo que las licencia se otorgarán al amparo de ese plan, de modo que, se podrá levantar una vivienda en un terreno que es edificable en ese plan que tiene 30 años pero es el que está en vigor, aún a sabiendas de que en el PXOM aprobado inicialmente en 2013 y que está pendiente de aprobación de definitiva , ese terreno no es edificable.
El concejal de Urbanismo, José Cudeiro afirma que si las posibles viviendas para las que se solicite licencia estén construidas de acuerdo a ese PXOM de 1986 y lo cumplen estrictamente "no existe riesgo alguno para el propietario". Es más, el Concello ha sido el primer interesado en hacer pública esta curiosa situación, que podría beneficiar especialmente al rural, con una edificabilidad más restrictiva. La mayoría de las licencias que podrían pedirse están en suelo urbano consolidado donde esta el tejido urbano de la ciudad.
El Colegio de Arquitectos de Ourense también avala la decisión del Concello de dar publicidad a esta nueva posibilidad de solicitar licencias, pues sin incurrir en ningún tipo de ilegalidad, "pues de este modo están haciendo dar información que esta esté al alcance de todos aquellas que quieran realizar una obra, de acuerdo al PXOM de 1986, en tanto no se aprueba el nuevo", indica el presidente de este órgano colegiado, Alberto de Paula.
Puntualiza que "lo único que cabe pedir a los solicitantes de estas posibles licencias es que los proyectos lleven el sello de personas especializadas para garantizar un buen modelo de ciudad", explica Alberto de Paula.
También como experto en la materia ratifica que "si las licencias que ahora se puedan conceder respetan la ley, las edificaciones no corren peligro y no serán derribadas".
Lo que desea es que "se empiece a pensar en un planeamiento urbanístico para hacer ciudad, no para sacarle rentabilidad a corto plazo".
