El fuego volvió a rondar las casas ayer en Ourense. Esta vez en el pueblo de O Xen, en la parroquia de Sobreira, Vilamarín. El incendio se declaró a las 19,06 horas y al cierre de la edición permanecía activo aunque prácticamente controlado. En un primer momento y antes de que llegasen los medios de extinción los vecinos temieron lo peor pues las llamas se acercaban peligrosamente a las viviendas y se vieron obligados a abandonar las casas. De hecho, según explicó un testigo el fuego quemó un cierre y parte de otro. La Consellería de Medio Rural movilizó para este incendio a dos agentes forestales, seis brigadas, cuatro motobombas, seis aviones de carga en tierra y dos helicópteros.
Otro incendio forestal afectó al lugar de Rocas, municipio de Esgos, durante la madrugada de ayer. El fuego comenzó a las 23,25 horas del sábado y quedó extinguido ocho horas después con la intervención de un agente, seis brigadas y cinco motobombas. En este caso, la superficie afectada es de dos hectáreas de monte arbolado.
También quedó extinguido durante la madrugada del domingo el incendio que se había declarado el sábado por la tarde en Feás, Toén, en el que ardieron seis hectáreas de bosque.
A las 22,15 horas quedaba finalmente extinguido el fuego de Padrenda, que había comenzó el viernes a las 1,50 y estaba en situación de "controlado" desde el sábado por la mañana. La estimación de superficie quemada, inicialmente de 207 hectáreas, se elevó a 235, todas ellas en territorio de Red Natura. En este fuego trabajaron un técnico 9 agentes, 12 motobombas, 30 brigadas, una pala y 6 helicópteros.
