Fidelidad en el PP, discrepancia fuera. Una veintena de los 104 presuntos enchufes de Baltar desempeñaban su trabajo a distancia. El presidente decretó su contratación temporal para ocupar puestos "urgentes e inaplazables" satisfaciendo las supuestas demandas de los alcaldes del rural. Una docena de regidores, todos del PP menos uno, comparecieron ayer a la penúltima sesión del juicio por presunta prevaricación continuada contra el expresidente de Ourense. Las aldeas fueron el granero de apoyos en su mandato. Nueve regidores del partido y un décimo que asistía como presidente de mancomunidad -varios se identificaron como amigos- arroparon la versión del acusado. El único que contradijo su argumento, Xabier Oviedo, de Maceda, ocupa otras siglas (CxG). El auxiliar dado de alta a principios de 2010 en su concello -la época que se somete a bajo juicio,- ya estaba cuando empezó a gobernar en 2007. Hoy es concejal del PP.

El acusado era un "alcalde de alcaldes", según las palabras de más de uno, que les solucionaba los problemas. "Cuando tenías uno, te dirigías a él", confirmó el primer edil de Toén, Amancio Cid. Los "socorría", manifestó José Antonio Feijóo, regidor del concello de Baltar. La generación de empleos de la Diputación, por descontada a principios de año con los presupuestos intactos, les permitía superar "emergencias" a través de operarios o paliar situaciones "imperiosas" de personal que, de no haberse atendido, obligarían a "cerrar" servicios. La urgencia que, según manifestaron en el juicio, requería tener auxiliares, agentes de empleo o monitores de toda índole en sus ayuntamientos por periodo de 3 meses, es más que discutible para las acusaciones.

Un regidor dio "10 nombres"

La declaración de los munícipes confirma que las contrataciones de personal se trataban directamente, y siempre de palabra, con el expresidente provincial, que el miércoles rectificó su interrogatorio para atribuirse la contratación y elección de los empleos. Alguno de los regidores que declararon como testigo, como el de Paderne de Allariz, José Manuel Fernández, aseguró incluso que le dio "diez nombres de viva voz" tras recabarlos de parados de su municipio que acudían al concello. Uno de los empleados fue N.G.B., que el miércoles negó su afinidad al PP pese a ir en las listas en 2003. El regidor, que entonces no gobernaba, dijo a los periodistas que "ya no es afiliado".

Todos los alcaldes del PP reconocieron ayer que le pidieron los trabajadores. Todos actuaron de forma verbal, sin plasmarlo por escrito, pese a que el expresidente, matizaron, se lo había pedido. "A veces se puede olvidar", dijeron mandatarios como el de Larouco, Joaquín Bautista, que necesitó un albañil para su concello de medio millar de vecinos. "Me parecía una pérdida de tiempo, despachaba con él 2 o 3 veces a la semana y creí que se solucionaría igual", declaró por su parte el de Baltar. Con cuatro décadas en la vida política, 22 al frente de la Diputación y un ritmo frenético de despachos, actos públicos, celebraciones, entierros y 500 firmas al día, José Luis Baltar lleva inscrita en su biografía la leyenda del "feito". Su "facilidad" y "cercanía", dijeron ayer los políticos, convertía el cara a cara en el canal.

A Emilio Pazos, alcalde de Trasmiras y diputado provincial, no le quedaba otra que contar con un chófer de maquinaria en 2010 para atender las habituales inundaciones que se registran en invierno. También consideró perentoria la incorporación temporal de un monitor y un peón de mantenimiento. Había, según sus palabras, "una emergencia cultural y social". El regidor consideraba que la Diputación era su "superior".

La hermana de una concejala

El exalcalde de Celanova, Antonio Mouriño, cree que el ente provincial estaba en la "obligación" de ayudar a los ayuntamientos ante su "falta de medios económicos para contratar personal". Una de las dos supuestas enchufadas es hermana de una concejal del PP en Ourense y fue compromisaria en el congreso provincial del partido, en 2010. Para José Antonio Feijóo, o se daba de alta a un agente de desarrollo local "o era mejor cerrar", afirma que le dijo al expresidente. "Fue exigente; me lo tenía que resolver cuanto antes". El testigo sostuvo que no le dio un nombre, "sino que pedí a una persona con capacidad". La contratada en 2010, hoy sigue a nómina del ayuntamiento.

Edesio Yáñez, mandatario de A Veiga, dijo que recibió del INEM el nombre del titulado en turismo que fue contratado por la Diputación para su oficina de promoción. Conocía al beneficiario por ser de la zona. Después de mantener "reuniones" con el expresidente, "conseguí que lo contratara", declaró antes de matizar que no lo recomendó.

El abogado del PSOE interrogó a cada alcalde del PP con el objetivo de oponer el proceso de los 104, restringido y sin pruebas de selección, al mecanismo que ellos aseguran haber aplicado en sus concellos al proveer plazas. "¿Contratan ustedes de forma verbal?", inquirió. Solo el regidor de Boborás, Cipriano Caamaño, admitió que lo hizo "hace años" cuando la ley lo permitía.