No es la primera vez que tratamos sobre las graves carencias en nuestra depauperada, abandonada y aletargada infraestructura cultural ourensana, pero por insistir y por recordárselo una vez más a nuestros despreocupados mandatarios, no quedará.

Y es que me vino a cuento por la comparación de nuestra ya lejana "Atenas de Galicia" con Guadalest, ya que, según reciente noticia, este bello pueblecito alicantino de poco más de 200 habitantes y coronado por magnífica fortaleza roqueña, al parecer puede presumir con orgullo de tener no uno, sino varios museos, del tipo y tamaño que sean.

Aquí en cambio, ya solo la reciente celebración del Día Internacional de los Museos tuvo que pasar forzosamente ignorada, sin pena ni gloria, porque nuestros museos o llevan años cerrados en espera de su prolongada iniciación de obras -como es el bochornoso caso del arqueológico, uno de los más importantes de Galicia en su género, y esencial para la ciudad y su turismo-, o sus depósitos están guardados, almacenados y cerrados bajo cámara de seguridad, sin posibilidad de exponerlos por falta de local adecuado, escaso interés o nulos medios económicos. Y en esto, como se ve, es que en Ourense ya no estamos ni a nivel de pueblo.

Y es que nuestros políticos responsables, no se dan cuenta de que esta carencia de plena actividad de nuestro museo, de su mantenimiento, actualización y aplicación de modernas técnicas expositivas, representa un grave quebranto no solo para la ciudad sino para todo el país, ya de por sí sin mucho hábito de visitarlos, así como culturalmente atrasado y aletargado respecto a otros de Europa. Y esto que hoy ha de ser tan esencial para el moderno ser humano, como el comer o beber, incluso en épocas de crisis económicas como las actuales, no quiere ser percibido, y ni siquiera incluido en sus programas por los encargados de elevar nuestro tan cacareado pero lejano bienestar social.

Ahora, aprovechando con oportunismo precisamente el pasado Día de los Museos, nos anuncia el Secretario Xeral de Cultura de la Xunta que el Gobierno -al parecer el central- "mantiene el compromiso adquirido" con el viejo e histórico edificio del Museo Arqueológico, para su recuperación, restauración y rehabilitación, pero aún para el próximo año 2014, lo cual ya sabemos por experiencia que en términos políticos, de momento es no decir ni concretar nada realmente creíble para los demás.

Ante esta lamentable situación, ya "congénita y ancestral", como diría nuestro desaparecido, genial y culto Luis Trabazo, que va para más de 11 años, propongo la recogida de las suficientes firmas entre los ourensanos, para pedir como en Fuenteovejuna que los que tienen de su mano arreglar estas cosas, tomen de una vez por todas la decisión, efectiva, de solucionar este tema, un tema que al menos debería de hacerles sonrojar y que sin duda viene lastrando su credibilidad entre los ourensanos.

(*) Técnico, exdirector del Museo Municipal.