"A pesar de estar con unos presupuestos prorrogados, en el Concello de Ourense seguimos haciendo obras" alegó ayer el alcalde de Ourense, Agustín Fernández para justificar el motivo de su visita, ayer, a la Plaza de Abastos de A Ponte para supervisar, a meses vista de su remate, el estado de las obras de reconversión de este mercado tradicional en un edifico multiusos, que combinará los conceptos de venta de mercadurías frescas con zonas de degustación y tapeo, biblioteca y otros espacios vecinales, todo ello en plantas y con entradas bien diferenciadas.

El alcalde y la concejala de Urbanismo, Áurea Soto acompañados por los dos arquitectos autores del proyecto, Alfredo Freixedo Alemparte y Pedro Diéguez, así como por representantes de Tragsa, la firma adjudicataria del apartado constructivo, visitaron ayer el tradicional mercado, que ha experimentado un total vaciado interno, lo que ha obligado a realojar a los 8 comerciantes de la plaza en una caseta provisional situada en la plaza Mestre Luis Fernández, contigua al mercado en obras.

Un edificio histórico

El emblemático edificio de abastos del barrio pontino fue diseñado en 1929 por el arquitecto Manuel Conde Fidalgo, pero la ejecución de la obra no culminó hasta bien entrados los años 30. Como edificio protegido se ha conservado la fachadas, pero el interior ha experimentado un cambio total, eliminando además las barreras arquitectónicas que había en el antiguo edificio y que obligaban a acceder a la biblioteca municipal del barrio través de unas empinadas escaleras, situadas en la plaza Mestre Luis Fernández, impracticables para los mayores del barrio que acudían a ese centro a leer las prensa diaria o al local vecinal.

Tras la obra de remodelación, en la primera planta irá la sala de exposiciones, sala de usos múltiples, biblioteca infantil con patio y dependencia de la asociación de vecinos, con entradas bien diferenciadas.

La planta baja, de la que se suprimen también las barreras arquitectónicas, acogerá el mercado, que incorporará zona de tapeo y degustación, puestos para realojar a los vendedores y puestos sobrantes para una posterior ampliación de la oferta, si hay demanda. "Se trata de hacer algo similar al mercado de San Miguel en Madrid", indicó Alemparte en relación a un mercado tradicional del Madrid de los Austrias, reconvertido en hervidero del ocio y gastronomía que combina tapeo, venta de productos fresco e incluso música o exposiciones.

Una entreplanta, hasta ahora inexistente, unirá esta plantaba baja del mercado con la de uso cultural a través de ascensor y/o escalera alternativa. El semisótano acogerá aseos, limpieza y otras instalaciones, con acceso directo desde la calle del Mercado. El proyecto ha experimentado un cambio que permite ganar 100 metros cuadrados más en el sótano, para dotar más bodegas para los comerciantes. Este cambio no afecta al coste final del proyecto que es de dos millones de euros.

El modificado se compensa con un cambio en el pavimento de la planta baja, la correspondiente al área de mercado que, en lugar de ir en granito, como estaba previsto, se sustituirá por un gres porcelánico compacto y antideslizante, que garantiza menos porosidad y más salubridad para un edificio público.

La obra de remodelación del mercado pontino, ha sido posible gracia al convenio firmado entre el Concello de Ourense y el Ministerio de Fomento, que cuenta con un presupuesto final de dos millones de euros y cuya ejecución ha sido adjudicada a Tragsa. El proyecto tiene un plazo de ejecución de 22 meses que remata en noviembre de 2013, pero según fuentes de la empresa, la plaza no reabrirá hasta el primer trimestre de 2014 pues no se puede recepcionar el ministerio asuma el pago del último plazo de la subvención, pago previsto para 2014.

Según confirmaron ayer fuentes del Concello al remate de la obra se realojar a los comerciante y se restaurará la plaza Mestre Luis Fernández (donde se ubica los puestos de venta provisionales) y que es hoy un espacio sitiado por las vayas y claramente deteriorada a causa de las obras de remodelación del mercado.