El arquitecto César Portela aseguró ayer que la futura estación del AVE de Ourense está llamada a ser un “monumento urbano”, tanto por su función, como por su significado y su localización, que se asentará en la actual estación Empalme, en la zona de A Ponte.

Durante su intervención en las jornadas que sobre la llegada de la Alta Velocidad a Ourense que organiza el concello, que versó sobre “Estaciones intermodales, porta da cidade”, recalcó que la Estación Central de Ourense tiene que ubicarse en “su sitio”, así como “crearse su entorno, construirse su propia y singular monumentalidad, rodearse de plazas, de vacíos a su alrededor”, que considera factores imprescindibles para la ciudad.

Pero Portela dijo estar convencido de que los más importantes, los más sociales son “los espacios públicos, que le confieren ese halo mágico”. Y sentenció que la estación actual, la “Empalme” , es, y aún lo será más, “monumento, por su forma y tamaño, por su función y por su significado”, como así lo valoraron los ourensanos, que de forma unánime entienden que debe ser la futura estación del AVE.

De ahí que al termino de su intervención fue de lo más explícito al señalar que “les deseo mucha suerte -sobre el diseño de estación intermodal- ya que será la imagen y la puerta de entrada del AVE a Galicia”, y apostilló que “como pontevedrés tengo tanto interés como ustedes en que todo salga bien”, pero sin avanzar si finalmente su equipo optará a presentar su proyecto, como si hizo en otras ciudades de España.

Experiencia

La exposición teórica que trasladó César Portela a los asistentes a las jornadas técnicas sobre el AVE, las complemento posteriormente con proyectos similares en diferentes ciudades del territorio nacional, y que conforma su experiencia en esta materia.

Así, como autor de los diseños, junto a su equipo técnico, de las estaciones del ferrocarril de Cádiz, la Estación Central de Valencia, la Estación Intermodal del Prat de Llobregat (Barcelona-Aeropuerto), y la estación de autobuses de Córdoba, César Portela aludió a que una estación de ferrocarril es un “edificio muy complejo tanto por su organización interior”, debido a que tiene que acomodarse a un trazado ferroviario y a múltiples funciones, “como por su inserción en la ciudad”.

Y reconoció ante el auditorio que también lo va a ser la nueva estación de Ourense, la cual se asienta en un lugar, como es A Ponte, “rodeado de una peculiar y accidentada geografía que determina el trazado ferroviario y los accesos que condicionan la solución que se pueda adoptar”.

A lo que hizo referencia, al mostrar la solución por la que se optó en Cádiz, que permitió “resolver un problema que tenían”, y que le sirvió para comentar que se debe tener en cuenta los dos tipos de estaciones del AVE, las denominadas “termino”, que es donde concluye el trazado de esa línea de ferrocarril, y las “pasantes”, que como en el caso de la de Ourense, a donde llegarán trenes que continúan a otros destinos, tanto hacia los diferentes puntos de Galicia como hacía el resto de España.

Sostiene Portela que las estaciones del AVE son “una ocasión única para construir un trozo muy importante de ciudad, y no solo un edificio”, de ahí la relevancia que tiene su diseño final, como sucede con la Estación Central de Valencia, en la que se consiguió “conectar dos partes de la ciudad, y consiguientemente su permeabilidad”. Uno de los objetivos que tiene la de Ourense.

La solución de Portela apostó por adaptar a las nuevas construcciones la estación existente, con el soterramiento de las vías, con lo que se libera en superficie para la ubicación de un paseo y edifico de servicios y hoteles. Algo similar a la propuesta que realizó en su momento el sindicato UGT, y que incluyó en las alegaciones al proyecto de integración del AVE que remitió al Ministerio de Fomento.