El 1 de febrero. Esa es la fecha que se antoja como más probable para el inicio de la campaña de la vieira. Todo ello si las analíticas son favorables y se concreta el acuerdo entre la Cofradía de Bueu y Porto Cambados, la empresa comercializadora con capacidad para evicerar el producto. El patrón mayor del pósito buenense, José Manuel Rosas, se reunió esta semana con la gerente de Porto Cambados y ayer mantuvo un encuentro con los armadores de Bueu interesados en explotar este recurso para trasladarles los resultados de esa reunión.
La sensación imperante es la de una más que justificada cautela. Desde Porto Cambados mostraron interés en adquirir parte de la producción de la flota de la ría de Pontevedra, pero sería a partir del 1 de febrero. Durante el mes de enero la planta permanece cerrada y la empresa no tiene previsto recuperar la actividad hasta el próximo mes. En todo caso hay una condición indispensable: que las analíticas ofrezcan resultados favorables. Hasta la fecha el único ámbito en el que los muestreos dieron índices dentro de lo permitido fue en el entorno de Aldán. Pero durante los próximos días se repetirán las analíticas en la zona intermedia de la ría y en el fondo. "Lo ideal sería que abriese al menos la parte central, entre Udra y Aguete", explicaba ayer uno de los armadores más veteranos de la vieira de Bueu. "Si abre este ámbito habría mar suficiente para que trabajemos varios barcos porque lo que se puede trabajar en Aldán es muy poco", cuenta.Esa parte central, la Zona II, es la más extensa y abarca la línea imaginaria que une Cabo Udra y Cabicastro hasta la línea que une Aguete y Punta Santa Mariña.
El patrón mayor de Bueu también ofrece más motivos para la cautela. "No son solo los resultados de las analíticas, hay que ver también como esta el recurso y si tiene bastante comida", puntualiza. Porto Cambados pone condiciones estrictas para recoger la producción y una de ellas es el tamaño, que debe ser al menos de 11,5 centímetros.
La apertura de la vieira supondría una oportunidad para cerca de media docena de embarcaciones, que podrían extraer un recurso muy apreciado. La otra ventaja es que serviría para dar un respiro a otras especies. Una de ellas es la ostra, cuya campaña es durante los tres primeros meses del año. "Si se pudiese ir a la vieira por lo menos podríamos dejar descansar este año la ostra para tener una mejor cosecha para el próximo año", sentencian algunos de los armadores.
