El cocinero André Arzúa felicitó al Concello por la iniciativa, a la que se suma, puesto que "me gusta la idea, no me gusta la parafernalia, acepté la colaboración porque se trata de hacer algo diferente y defender lo nuestro", reconoció. Arzúa reivindicó la variedad más allá del cocido, "cuando se habla de Lalín, se habla de cocido y a reventar, y sí ¿por qué no? pero también hay otras cosas", indicó. Quiso ensalzar el potencial de los cocineros y camareros locales, porque "en Lalín no solo es comer el cerdo entero".

Por su parte, Diego López, del restaurante la Molinera quiso agradecer al Concello poner en marcha este tipo de iniciativas. El cocinero lalinense destacó que "somos cocina actual, somos gente con locales a los que acude la gente y por algo es, además ofrecemos variedad". Sin embargo, no quiso restar importancia al papel del plato principal de la cocina lalinense, el cocido. Una comida que ha sido el motor de la hostelería en la zona, "no conozco platos que hagan desplazar a tanta gente como este, quitando a lo mejor la lamprea y es un período más corto de tiempo, nosotros servimos cocidos casi todo el año, no solo en invierno", argumentó. También Patricia Galego del Bodegón a Cunca, ensalzó el papel del cocido por su efecto llamada, que repercute también a locales como el suyo en los que el cerdo no es el plato principal.