La parroquia estradense de Sabucedo sedujo ayer con su Muiñada, Magosto e Samaín (MUSA). En una jornada marcada por unas temperaturas suaves que incitaban a la manga corta, Rapa das Bestas y Asociación de Veciños de Sabucedo pudieron constatar que su MUSA atrae cada vez a más público, contribuyendo así al fin que persigue: desestacionalizar el atractivo de la parroquia más allá del primer fin de semana de julio y su emblemática Rapa das Bestas.

El día arrancó con la Ruta de Sabucedo y sus dos variantes, que atrajeron a un centenar de participantes. El curro nuevo, senderos fluviales, molinos, el curro viejo, el pueblo, la exposición exterior de la Rapa, petroglifos y naturaleza cautivaron a los caminantes.

Luego, la actividad se concentró en el Muiño do Mestre, donde se presentó el libro de fotos de la Rapa Os Fillos do Vento de Ariadna Sil va Fernández, con una proyección audiovisual musicada. Mientras que el horno adquiría temperatura para cocinar empanadas de maíz, arrancaban los talleres de pan y filloas, manualidades y un aperitivo musical, muy cerca del Mercado de Outono que tentaba con mantelerías bordadas a mano, esculturas de cerámica y crin de caballo, pulseras con crines equinas y productos propios de la época como castañas o nueces. Tras la comida al aire libre, comenzó el taller de Samaín para los niños, preparatorio de la procesión da Santa Compaña prevista para última hora de la tarde.