El gobierno municipal de Silleda acaba de resolver la adjudicación del diseño del que será la nueva casa consistorial. La decisión del ejecutivo de Manuel Cuiña fue ratificada en la junta de gobierno local el acta de la mesa contratación del concurso de ideas para la elaboración del proyecto.

La propuesta elegida es la presentada al concurso por el arquitecto local Abraham Castro Neira que, bajo el lema Naturalmente Noso, logró la mayor puntuación entre las cuatro ofertas que se presentaron, después del proceso de convocatoria a los estudios de arquitectura silledenses. Para la elección del proyecto se tuvieron en cuenta criterios tanto estéticos; referidos a la idea arquitectónica o el estilo, como la funcionalidad (distribución interior o aprovechamiento de la parcela) como la valoración económica y otras aportaciones. En la selección tomaron parte miembros del grupo de gobierno y técnicos municipales.

El traslado de la Casa Consistorial y la unificación de los servicios municipales en la actual Casa da Cultura fue respaldada por los vecinos por un escaso margen en la consulta popular celebrada el pasado 4 de junio. Es, para el gobierno, uno de los proyectos más destacados del presente mandato, junto con otras actuaciones ya en marcha como el Centro de Día y residencia, que se está construyendo en la parcela municipal anexa al recinto ferial.

Características

En la propuesta arquitectónica se conecta el actual edificio con el que está situado en la parte trasera a través de un gran jardín central. Castro Neira integra ambas partes como resultado del uso de materiales y acabados común. El empleo de materiales autóctonos y de marcado carácter tradicional empleados con un lenguaje propio, dan sentido identitario al conjunto.

Según el autor, el concepto Naturalmente Noso hace referencia a varias ideas que fueron claves en la concepción inicial, como la idea de lo natural, la naturaleza como elemento que nos rodea en el rural; o el concepto de pertenencia que hace referencia a la identidad. Además, en palabras del arquitecto seleccionado, el proyecto fue especialmente diseñado para ser ejecutado con los medios adquiridos en el entorno más cercano: el concello y la comarca, sin necesidad de ir más allá, con el objetivo de revertir en la economía local. Pese a que se trata de una edificación con un planteamiento absolutamente racional en su funcionamiento, en su sistema constructivo e incluso estructural, se proyecta de tal modo que se dota de una gran carga simbólica. El sistema de vigas que sustentan las terrazas es un conjunto de 33 piezas: cada una de las parroquias; en este conjunto, en el lugar que les corresponde aparecen dos grandes espacios vacíos donde crecen los árboles. El edificio se conecta con el jardín por dos bandas de césped igual que el Deza y el Toxa confluyen con sus aguas en el Ulla. "La sobriedad, equilibrio y racionalidad que representa la configuración de este volumen junto a su carga simbólica es lo que una institución o administración pública debe ser: equilibrada, sobria y racional, guardando con agarimo en su esencia interior las particularidades del lugar al que pertenece", comenta Castro Neira.

Son dos edificios conectados mediante una pasarela. En el de la parte trasera se ubica una nueva construcción con dos plantas -con más de 400 metros útiles cada una- que estaría conectada con el edificio central por una pasarela. Mediante la intervención en el inmueble principal, de la Casa da Cultura, se recuperará el carácter original del edificio, logrando el ideal al que la intervención original hace más de 30 años no llegó. Además, el arquitecto resalta que se retoma ese carácter y restableciendo su aspecto potenciado por la proyectada reforma, a la vez que se adapta a las nuevas circunstancias. La parte exterior será más reconocible.

782.316 euros

La propuesta plantea situar en la planta baja servicios como el Juzgado de Paz, registro general o la Policía Local. En la primera irían otras dependencias, mientras que en la segunda se habilitaría el salón de plenos y otro de actos. La superficie útil total será de 810,96 metros cuadrados y el presupuesto estimado de la obra se sitúa en 782.316 euros. El mandatario local agradeció la participación de los estudios de arquitectura de Silleda "con interesantes propuestas que nos dieron diferentes visiones sobre la iniciativa a trasladar y, ante todo, centralizar los servicios municipales en un único recinto de cara a mejorar la atención a todos los vecinos".