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Infraestructuras municipales

La construcción de la rotonda de O Montserrat condicionará los accesos al cementerio antiguo

El camposanto podría quedar bloqueado a la circulación si el vial que parte de Bos Aires no tiene salida hacia la glorieta -La rúa Da Fonte, en Donramiro, también quedaría sin acceso a la avenida y solo para el tránsito interno

El Concello de Lalín aprobó ayer el proyecto para la construcción de la última rotonda pendiente en la antes denominada carretera de circunvalación y que ahora se reparte entre las avenidas Xosé Cuiña y Madrid. Es precisamente en esta intersección, a la altura de O Montserrat (Donramiro) donde el próximo verano comenzarán las obras de esta glorieta, un proyecto en el que se invertirán 192.000 euros.

La creación de esta infraestructura es clave para la seguridad vial en este punto, con un importante índice de siniestralidad, una vez que es una de las zonas que separa el núcleo de la capital con el área periurbana de Donramiro y la obra también había sido demandada por el PP a comienzos del presente mandato. En esta glorieta confluyen las avenidas Montserrat y Estación y Madrid y Cuiña. Pero además existen otros dos accesos que, según el proyecto técnico elaborado por el Concello, quedarían o bien bloqueados al tráfico o al menos sin acceso directo a la nueva rotonda. El quizá menos relevante sea el cierre de la conexión de la calle Da Fonte de Donramiro con esta vía de circunvalación. La pista, muy estrecha y por la que no hay espacio para el tránsito de dos vehículos en paralelo, es utilizada sobre todo de salida de la iglesia parroquial de Santa María y del núcleo de casas de la zona conocida como Aldea de Riba. No obstante, no hay ninguna señalización que prohiba tomar esta pista también desde la intersección y la zona de la futura rotonda. Más complicada será la situación de acceso al cementerio municipal antiguo que, emplazado al otro lado de la calzada, tiene un único acceso por la Avenida Bos Aires, en las inmediaciones del cruce de Feás. En caso de que la salida de esta vía hacia el cruce de O Montserrat también quede cerrada, el acceso al camposanto se verá seriamente condicionado. Cabe recordar que, por seguridad, desde hace años está prohibido tomar esta pista en sentido de subida hacia el cementerio y solo es de bajada. Pero con la supresión de la salida, la circulación de vehículos por este vial se antoja prácticamente imposible debido al escaso ancho de la misma. Los turismos que entren hacia el cementerio desde Bos Aires, al no tener salida, podrían quedar sin margen de maniobra una vez que el ancho de esta pista prácticamente impide realizar giros para tomar la salida por la zona natural de entrada, al margen de que podrían producirse embotellamientos. Por tanto, una posibilidad es que se deje libre de tráfico, por donde ya es muy complicado el tránsito, el camino del cementerio.

El proyecto de la rotonda establece que sus dimensiones, serán levemente superiores a las que se barajaba en un inicio: la glorieta tendrá 50 metros de radio (en lugar de los 30 iniciales) y ocupa entre 600 y 700 metros cuadrados, en vez de 400. Las parcelas afectadas estaban en manos de 11 propietarios, que optaron por tener a cambio aprovechamientos urbanísticos en el SUE-3, dado que el precio que se les ofrecía por esas parcelas (algunas de 6 metros) les parecía irrisorio. Así, por ejemplo, por 100 m2, el dueño puede obtener entre 50 y 60 m2 de aprovechamiento de vivienda construida. El proyecto, como inversión financieramente sostenible, fue aprobado hace más de un mes, pero en el pleno de anteayer se dio el visto bueno al crédito necesario para acometer la obra, que cuenta con los preceptivos permisos de las administraciones superiores. Los pliegos del proyecto han de estar aprobados antes del 31 de diciembre de este año y el gobierno local calcula que la obra estará lista antes del verano del próximo año.

El plan de ejecución es de un mes, según el informe técnico municipal. Los firmes y pavimentos necesarios para la infraestructura absorberán algo más de 87.000 euros y para alumbrado público consta una partida que rebasa sensiblemente los 16.400. Otro capítulo destacado son los 10.200 euros necesarios para señalizaciones, mientras que para demoliciones y movimientos de tierras y reposición y abastecimiento de agua hay paridas por 6.200 y 4.800 euros respectivamente. Otros casi 6.000 son necesarios para dejar en perfecto estado la zona verde de la rotonda.

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