"Ya no es una fiesta de noche propiamente dicha, sino que lo que intentamos es que sea una jornada que empiece a las dos de la tarde, que puedas estar con la familia hasta la una o las dos de la mañana y puedas haber disfrutado de un día de fiesta". Así explicó ayer Álex Brey, uno de los organizadores del festival As Nosas Músicas, de Couso, la filosofía de la cita, que el próximo lunes 14 de agosto celebrará su vigésimo segunda edición. Su programación fue presentada ayer por el propio Brey, por Iván Magariños y por Manuel Brey, también miembros de la asociación A Xesteira, que estuvieron acompañados por el alcalde de A Estrada, José López Campos.

Las actividades comenzarán a las 14.00 horas con una sesión vermú animada por la charaga de la agrupación compostelana Ultreia. A partir de las 16.30 horas, en el campo de la fiesta, habrá oportunidad de divertirse con los juegos tradicionales que ofrecerá Xandobela a niños y adultos. Dos horas más tarde, dará comienzo el taller gratuito que impartirá el artesano de Calo Oli Xiráldez y que lleva por título "Enredos sonoros". A las ocho de la tarde habrá una charla sobre la historia de la música tradicional gallega a través de los instrumentos, de la mano de Pablo Carpintero. La oferta de talleres rematará con el que a las 21.00 horas impartirá Marcos Botana, que invitará a iniciarse en el baile tradicional.

Los conciertos nocturnos comenzarán a las 22.30 horas. Las primeras en actuar, a pie de campo, serán las "cantareiras" y "pandereteiras" Leilía, que volverán al festival después de haber tocado ya en sus primeros años. El otro guiño al pasado llegará de la mano de Art-Monium, habitual también en los inicios de la fiesta de Couso. Tocará un primer pase después del grupo femenino. A continuación, tomará en relevo la formación sarriana Airiños da Freba. Tras un segundo pase de Art-Monium, será el grupo Tiruleque el que cierre el cartel. "Sin el apoyo del Concello, de la Diputación, de la asociación y de la parroquia no sería posible hacer esto", señaló Manuel Brey, que cifró en unos 18.000 euros el coste de la organización del festival, con el que colaboran económicamente más de medio centenar de patrocinadores. La organización procura "la creación de espacios para todo tipo de gente", cuidando los detalles, "basándonos en el cuidado, la higiene, el respeto a la naturaleza y en el ecologismo" para ofrecer un ambiente agradable en el que disfrutar de la música tradicional al aire libre.

La organización dispondrá también una zona de acampada y de espacio para el estacionamiento de vehículos, por el que no cobrará más entrada que la que cada usuario quiera aportar para contribuir a financiar el evento.