Rafael Cuiña aprovechó el almuerzo informativo de ayer para realizar algunas valoraciones desde un perfil más político. Se alejó de proyectos y propuestas para asegurar que el cuatripartito está unido y su objetivo es "trabajar por el bienestar de los vecinos" y tampoco pudo escapar a los recientes acontecimientos como la incapacidad numérica para sacar adelante el presupuesto de este año. Si al edil no adscrito Juan José Cruz prácticamente lo obvió y solo dijo que su desconocimiento de la administración le lleva a pedir actuaciones para el rural con los fondos DUSI, "cuando todos sabemos que se trata de una estrategia europea urbana". El alcalde, ya como máximo representante de Compromiso por Lalín (CxL) aseguró que posee datos que situarían a su partido cerca de ser la primera fuerza y que estas encuestas o análisis indican claramente "que todos los partidos del gobierno salen reforzados". "Sé que el Partido Popular debería tener unos datos muy similares y por eso quizá se dedican a mentir en cuestiones como la de las pistas". Cuiña, que eligió para su comparecencia el bar Alborexa -el principal lema de su campaña y uno de los de su etapa en la Alcaldía" manifestó la confianza que tienen los vecinos por el proyecto "de este gobierno de integración". "Si este domingo hubiese elecciones, este gobierno saldría reforzado y por eso se entienden actitudes del partido de la oposición, que se apoya en un tránsfuga".
Cuiña también habló de las complejas relaciones con el Partido Popular, un grupo que no cierra la puerta a una moción de censura, que votó en contra del presupuesto y que asegura que el ejecutivo municipal no es de fiar. En este sentido dijo que en la contienda política es razonable que cada uno busque su estrategia y dijo al "supuesto líder del PP de Lalín" [en alusión a su portavoz, José Crespo] que siempre tendrá las puertas abiertas para lograr entendimientos "pese a estar últimamente en el monte político". "Con Crespo voy a actuar como él lo haga conmigo, aunque estos días el PP está dando muchos golpes y a veces uno se cansa de poner la otra mejilla", sentenció. Con todo abogó porque su disputa con el líder de la oposición no se convirtiese en una permanente lucha de egos y dijo que su hoja de ruta solo pasa por "trabajar por los vecinos".
