Un vecino de Silleda fue encontrado muerto ayer por la tarde en su domicilio de Outeiro, en donde residía solo desde el fallecimiento de sus padres, hace años. Antonio Paz Pérez, popularmente conocido como Toño Catalino, tenía 54 años y podría llevar un par de días muerto. La Guardia Civil accedió a la vivienda, que no presentaba signos de haber sido asaltada, así como tampoco había muestras de violencia en el cadáver. Las primeras hipótesis apuntarían o a la mala combustión de un brasero o a un suicidio.