Si cada estación tiene sus colores, también posee sus propios sabores. A Estrada paladeó ayer el gusto del otoño a través de los productos que diversos comerciantes transportaron hasta las instalaciones del Novo Mercado en el marco de la Feira de Outono.

A los artículos que habitualmente ofrecen los productores que secundan el mercado municipal durante la feria del sábado se sumaron los embutidos, quesos o la sidra ofrecidos por diversas firmas estradenses, tanto para su degustación por parte de los asistentes a esta feria como para su venta.

Y si de catar el sabor del otoño se trataba, no podía faltar la castaña. Todos aquellos que realizaron alguna compra en el mercado recibieron un ticket que pudieron canjear a los dos accesos a la plaza por un cucurucho de castañas asadas. Este fruto otoñal fue también protagonista en el transcurso un curso de gastronomía de esta estación inicialmente pensado para hosteleros pero finalmente abierto a otros participantes.