Múltiples acreditaciones nacionales e internacionales avalan el trabajo realizado por el Grupo de Cans de Rescate en los últimos años, reconocimiento a una preparación que los de A Estrada han demostrado sobre el terreno en numerosas búsquedas de personas desaparecidas. Con una media de unas 25 intervenciones por año, la unidad se fundó en 1997. Los primeros pasos se dieron en el terreno de la formación, apostando por la preparación tanto de los canes como de los propios guías.

Hasta ayer el grupo estaba conformado por seis integrantes, después de que otros tres se hubiesen desvinculado de la unidad en los últimos tiempos. El trabajo que realizan es tan voluntario y altruista como exigente, ya que la entidad establece tres sesiones de entrenamiento cada semana -lunes, miércoles y viernes- con una media de cinco horas por jornada, si bien estas se encuentran muy condicionadas por la luz diurna.

El trabajo desempeñado por esta unidad la avaló para que A Estrada fuese, varias veces seguidas, sede de los exámenes de la International Rescue Organisation (IRO), el organismo más importante a nivel mundial en el ámbito del rescate con perros.