Organizadores del festival DeMonteSound, que se celebrará en Cerdedo el próximo 23 de julio, salieron al paso de la polémica surgida en el último pleno municipal de Forcarei, en el que desde la oposición se culpó al gobierno de no haber brindado suficiente colaboración para que este evento pudiese mantenerse en el municipio. Desde la organización se reconoció que "desde febrero hasta mayo" estuvieron intentando "por todos los medios" que esta segunda edición fuese en Forcarei. "Pero no fue posible", apunta, para luego añadir que lo intentaron con emplazamientos como los campos de fútbol de Forcarei y Soutelo, así como en las instalaciones del colegio soutelano o en Aciveiro.

La asociación Co-Enrédate impulsa este festival. Explican que en su diseño participan doce vecinos de Forcarei y Cerdedo, "de todos los colores políticos". Sostienen que el equipo tiene como único interés dinamizar y promocionar Terra de Montes. "Aquí no hay colores, ni localismos, es nuestra manera de contribuir y de sentirnos bien con nosotros mismos porque aportamos nuestro granito de arena a un proyecto que beneficia a la comarca", sostienen. Dicen que este afán encontraron "un buen ejemplo de colaboración" en la corporación de Cerdedo. "Ojalá el año que viene se sume Forcarei", apuntan.

En cuanto al cumplimiento de la normativa a la que tantas veces se aludió en la polémica suscitada por el traslado del DeMonteSound a Cerdedo, desde la organización se apunta que nadie dijo lo contrario. Seguidamente, añaden que una manera de cumplirla, para poder hacer el festival en el campo de fútbol de Forcarei, hubiese sido tirando un muro para conseguir una salida de emergencia de 15 metros de ancho. Sin embargo, sostienen que el gobierno forcaricense les pidió que se hiciesen cargo de "solicitar y pagar dos licencias de obras; buscar una empresa que se hiciese cargo de las obras; hacernos cargo nosotros de los gastos por el derrumbe y posterior construcción del muro y, a mayores, aportar una fianza equivalente a los gastos de la obra". Indican que fue ahí cuando solicitaron la colaboración del Concello a través de sus empleados y de la maquinaria municipal. "Ayudas que les conceden a otras organizaciones. En cambio a nosotros nos la denegaron", sostienen.

Declaran que lo único que se les propuso desde el ejecutivo fue el polígono de Vilapouca, "pero enseguida se retractaron porque podíamos molestar a las empresas", dicen, antes de añadir: "En ningún momento nos ofrecieron Aciveiro ni Pardesoa". Recalcan que la primera edición se celebró en Aciveiro por iniciativa propia y que este año se volvió a plantear pero no pudo ser por cuestiones como no interrumpir la celebración de una boda. Pardesoa y A Freixeira también fueron opciones pero los terrenos no reunieron las características que precisa el festival.