-¿Cómo tienen pensado celebrar el 30 aniversario de la Asociación Cultural Xirandola?
-En principio no tenemos nada planeado aún, pero sí lo vamos a hacer. Lo hicimos con los 20 y con los 25. Tendremos que hacer algo bonito. Nosotros siempre buscamos grupos de España porque si te metes en grupos internacionales es mucho más difícil de conseguir. Eso es algo que nos queda por hacer. Como mucho puedes conseguir traer algún grupo de Portugal, pero es que hay grupos que a lo mejor te vienen pero cobrando, y nosotros económicamente no nos lo podemos permitir. A nivel intercambio es más factible porque asumimos lo que son los gastos de hospedaje y manutención, lo mismo que nos pasa a nosotros cuando viajamos fuera.
-¿Y aprovechando la visita de grupos de otras partes del mundo cuando vienen invitados a certámenes en Galicia?
-Eso sería lo ideal. En ciudades como Vigo, por ejemplo, que es un concello grande, lo tienen mucho más fácil. Sí es cierto que se trata de experiencias muy bonitas porque siempre es enriquecedor compartir tu cultura con otras diferentes. De hecho, eso nos sucede cuando vamos fuera y sí lo notamos. Hace dos años estuvimos en Santander y coincidimos con un grupo de México y es algo muy interesante. Ves culturas y bailes diferentes, pero luego hay algo en común, que es el amor al baile, y eso lo tenemos todos los grupos. Una puesta en escena de un grupo de México y otra nuestra es algo muy importante, que va unido al respecto con el público que te contempla.
-¿No tiene pensado jubilarse?
-Los años no perdonan. Me gusta dar clase y me gusta bailar, y yo sé que tampoco voy a llegar a los 60 bailando. Es diferente, y hay etapas. Lo que sí tengo que claro es que Xirandola estará conmigo hasta el día que me muera.
