El concejal que coordina el área de Deportes del PP de Lalín, José Antonio Varela, salió al paso de las afirmaciones del grupo de gobierno acerca del estado del graderío viejo del estadio Manuel Ángel Cortizo. Los populares habían asegurado que esta estructura presentaba aluminosis y que era inútil construir en sus bajos unas oficinas para el Club Deportivo Lalín. El Concello alegó que un informe de técnicos municipales y otro externo negaban tal afirmación y que las gradas eran recuperables con obras de mantenimiento.

Ahora, Varela explica que el arquitecto redactor del proyecto que el PP tenía previsto para el campo de fútbol -el mismo que consultó el actual grupo de gobierno- puntualizó que el daño que presenta el viejo graderío es el de "carbonatación" e incluso admitió "en su día que era un error acometer obras en esta instalación", pues hacerla nueva solo costaba un poco más que reparar la vieja o que la cubierta estaba en muy mal estado. El concejal popular cree que gastar una parte de una partida de 56.703 euros para la oficina del club en los bajos de las antiguas gradas es un error pues, como indican los técnicos, obliga al Concello a realizar tratamientos en la estructura. "No deja de ser un parche en unas instalaciones que tarde o temprano tendrán que sustituirse".

Por ello propone que el local social del CD Lalín se construya a continuación de la nueva grada situada detrás de las porterías y que no presenta ningún problema estructural, con lo que quedaría una nueva oficina en un entorno totalmente nuevo y este local no sería un "parche en la vieja instalación" del estadio municipal.