La apertura del supermercado de la compañía levantina Mercadona en Lalín -que supone su desembarco en la comarca- se retrasará, al menos, hasta 2015. La Consellería de Medio Ambiente planteó recientemente una serie de correcciones al plan de sectorización aprobado por el ayuntamiento que, aunque en principio no son contundentes, sí dilatan todavía más el desarrollo urbanístico de la zona de A Trigueiriza donde se asentará el área comercial.

Una vez que la Consellería de Medio Ambiente comunicó al gobierno local la necesidad de solventar las correcciones al proyecto de sectorización, el Concello contactó con los promotores para que las solventasen y poder así dar continuidad a un expediente que, sin estar atascado, sí va más despacio de lo previsto inicialmente. El concejal de Urbanismo lalinense, Román Rodríguez, señala que los reparos de la Xunta no son excesivamente relevantes, si bien admite que ello retardará el proyecto. Una vez que el departamento autonómico reciba de nuevo el documento tiene un plazo de dos meses para contestar a los dueños de los terrenos y verificar que las correcciones han sido resueltas. Rodríguez precisa que en este caso el Concello ejerce solamente de "mediador" o enlace entre promotores y administración autonómica.

De hecho, el gobierno local aprobó a mediados de enero el plan de sectorización de A Trigueiriza tras rechazar las alegaciones; seis de particulares y aprobar una del grupo socialista referida a la petición de documentación del expediente. Pero con el reparo de la Xunta implica una ralentización de un proyecto que Mercadona mantiene, aunque inicialmente sus pretensiones pasaban porque el supermercado pudiese estar inaugurado para finales de este año. La aprobación inicial del plan de sectorización se cerró hace 11 meses y luego se abrió el correspondiente período de exposición pública.

La dilación del proceso administrativo varió los planes de la cadena de alimentación valenciana que, en enero, ya indicó que la apertura del recinto no sería posible hasta 2014. Pero con este nuevo escenario todo apunta a que, siendo optimistas, no será, al menos, hasta dentro de dos años. Antes de que comiencen las obras del supermercado es preciso que los promotores desarrollen la urbanización de un ámbito de actuación de más de 15.000 m2. El responsable municipal de Urbanismo dice que por experiencias previas estos procesos suelen ser más largos de lo previsto, al margen de que las obras del espacio comercial puedan apurarse, una vez que Mercadona recepcione el terreno, al máximo. La compañía estimó en unos 10 meses el plazo mínimo para que el área comercial estuviese rematada; situada en uno de los márgenes del vial que une As Queimadas con el centro comercial Deza. "Mantenemos nuestra apusta por Lalín", afirma la empresa, que prefiere no concretar una fecha para la apertura del recinto.