El gobierno local de Caldas ha puesto en marcha el segundo proceso urbanístico en los últimos ocho meses para recalificar los terrenos del polígono empresarial de Veigas de Almorzar, en Bemil, con el fin de legalizar las empresas e industrias allí asentadas. Si en julio de 2012 se procedía a tramitar un proceso idéntico para el denominado "Polígono de Clavo", ahora se pone en marcha para otros 57.754 metros cuadrados, según se detalla en la documentación remitida a la Xunta para analizar si la revisión de las normas requiere o no de una evaluación ambiental previa.

Estos informes se encuentran expuestos al público y apuntan que "el Concello de Caldas tiene especial interés en el desarrollo urbanístico" de esos terrenos, situados al borde de la N-640 "en los que ya existe una implantación de actividades industriales y terciarias, con empresas consolidadas y un peso específico importante en la economía y el empleo comarcal e incluso provincial".

Sin embargo, la catalogación del suelo no permite regularizar la situación de estas firmas, de ahí que se apueste con esta modificación con asignar a los terrenos el necesario uso empresarial, un cambio que ya se incluye en el Plan Xeral de Ordenación Municipal en fase de elaboración, pero que se quiere adelantar ante "la urgente necesidad de algunas de las empresas instaladas de acometer las actuaciones precisas para mantener su actividad y mejorar las condiciones en las que se desarrollan".

Crecimiento

En julio de 2012 se inició un proceso similar para la zona industrial de Outeiro, en Bemil, un ámbito de 56.000 metros cuadrados que, pese a albergar varias empresas desde hace años, está calificado como suelo rústico y no empresarial, de modo que esas compañías se encuentran "fuera de ordenación" y, por tanto, sin posibilidades de crecimiento ni mejora, algo muy parecido a lo que ocurre al otro lado de la carretera y que se quiere resolver con este segundo proceso.

Si en julio se opta por un instrumento urbanístico propio debido a "la lejanía en el tiempo con la que se atisba la formulación de un Plan Xeral de Ordenación Urbana", este PXOM parece ahora más cerca ya que hay un consenso al respecto entre los grupos municipales, pero se utiliza de nuevo la vía propia por la "urgencia" de las empresas, una "necesidad manifestada reiteradamente por los empresarios de la zona, así como su disposición e incluso compromiso, de desarrollar el planeamiento con carácter inmediato, compromiso que plasmaron en una propuesta de convenio incorporada al PXOM en tramitación".

Tanto hace ocho meses como ahora "se pretende congraciar el interés público que representa la mejora sustancial de la ordenación pormenorizada que se formule con la posibilidad" de favorecer a unas empresas que contribuyen a la economía local.