El sector de los servicios sociales está experimentando un bueno momento en el Concello de Lalín, favorecido por el aumento constante del envejecimiento poblacional y por los avances ofrecidos por la Ley de Dependencia. Así, el plan de avance de la Axenda 21 Local que maneja el Ayuntamiento revela un fuerte ascenso de este sector productivo, que ya cuenta con 39 empresas dedicadas específicamente a actividades sanitarias y servicios sociales.

Este documento, que está siendo estudiado tras ser remitido por la Dirección Xeral de Sostibilidade con el propósito de tenerlo concluido el próximo mes, también realiza un amplio análisis de los servicios sociales del municipio. En concreto, Lalín cuenta con 13 centros específicos de atención a mayores, de los que cinco son de iniciativa social, cuatro de carácter público y los cinco restantes de titularidad privada.

Además, el concello cuenta con casi 500 plazas entre residencias, guarderías y otros centro de atención, así como otros servicios cuya capacidad varía en función del número de usuarios. En total, hay 238 plazas en geriátricos repartidas entre las 76 de Nosa Señora das Dores, con 49 de ellas financiadas; 11 en la vivienda comunitaria Fogar Santa Rita; y 151 en el complejo de Geriatros en Filgueira, que dispone de 90 plazas públicas subvencionadas por la administración autonómica.

Las guarderías cuenta con un centenar de plazas menos que las residencias, ya que disponen de 135 repartidas entre las 74 de la escuela infantil Pontiñas y las 61 del recinto del polígono Lalín 2000. Entre ambas suman nueve unidades escolares.

Además, la oferta se completa con 156 plazas en dependencias de otras características, como las 50, 15 de ellas públicas, del centro de día Javier Brandido de Vilanova, las 30 del centro ocupacional que también lleva el nombre del expresidente de Aspadeza, las 40 del centro de día Nosa Señora das Dores y las 36 del punto de atención a la infancia del colegio Sagrado Corazón. Estos servicios se reparten la atención a persona con discapacidad, mayores y niños.

A mayores, también existe un programa de ayuda en el hogar municipal, prestado por la empresa Galaurea, y otro de carácter privado gestionado por la firma Adiante. En ambos casos prestan servicios de atención a la comunidad centrados en las necesidades domésticas. Finalmente, también existe un tercer programa de apoyo domiciliario por parte de la asociación Apalc, que gestiona la residencia de As Dores, y que dispone de cheque de apoyo para sus usuarios.