La marea humana que ayer y anteayer inundó las calles de Vilagarcía se dejó sentir en los servicio de emergencias de la ciudad. Mientras que desde el Sergas apuntan a una "jornada relativamente tranquila" -teniendo en cuenta la fecha de la que se trata- en Urgencias del Hospital y en el PAC de San Roque, las dos ambulancias de Protección Civil realizaron 30 intervenciones urgentes a causa de intoxicaciones etílicas y reyertas. A mayores, hay que añadir las múltiples curas leves que los efectivos realizaron in situ.

Como cada año, las actuaciones se centraron en la playa, zona portuaria y avenida de A Mariña, puesto que son los lugares más concurridos. Los locales de la TIR contrataron su propia ambulancia.

El suceso más grave ocurrió ayer sobre las tres de la tarde en el Bosque dos Desamparados, donde un joven de 21 años, vecino de A Coruña, fue atropellado por un conductor que intentó darse a la fuga, según comentaron los testigos a los servicios de emergencias. El herido presentaba múltiples traumatismos.

En cuanto a las intoxicaciones por alcohol atendidas, desde Protección Civil destacan que este año la mayor parte de ellas correspondían a mujeres. Entre ellas, una adolescente de 14 años, de Langreo, la cual fue asistida en la zona de las atracciones.

Entre las personas atendidas por las ambulancias del Servicio Municipal de Emergencias figuran vecinos de Santiago, A Pobra do Caramiñal, Porriño, Vigo, A Coruña, Pontevedra, Catoira, Marín, Moaña, Vilagarcía, Ponteareas e incluso extranjeros de Venezuela y Bélgica. La franja de edad de casi todas las asistencias oscila entre los 20 y 35 años.

Por su parte, la Policía Nacional tiene constancia de varios hurtos, así como de una reyerta en el aparcamiento de Renfe, donde se resolvió la intervención sin ningún detenido. Fue a las 13,25 horas. En las inmediaciones de la estación de tren tuvo lugar otro hecho que, si bien pudo causar una desgracia, afortunadamente se quedó en un susto. Un joven asistente a la Festa da Auga irrumpió en la vía del tren, lo que obligó a interrumpir durante unos instantes el tráfico ferroviario. Vigilantes de la obra que se ejecuta en el entorno lograron retenerlo.

La "movida" nocturna -que se prolongó durante el día- también se saldó con varios accidentes de tráfico, como una salida de vía en la N-640 a la altura del enlace con el hospital. Otro incidente tuvo lugar en la playa de A Concha, sobre las doce de la noche. Allí se declaró un incendio en una palmera.

Con todo, teniendo en cuenta las miles de personas que se concentraron en Vilagarcía (más de 30.000 según el Concello) en esta edición de la Festa da Auga, no hubo que lamentar graves sucesos.