El patrón mayor de la Cofradía de Carril, Fernando Franco, califica de "falta de respeto" las críticas vertidas por un grupo de mariscadores al funcionamiento de la lonja. El portavoz de los trabajadores del mar carrilexos asegura que la rula funciona debidamente y asegura que la caída de precios nada tiene que ver con el modo en que se parcela el marisco.

Con indignación ha acogido el patrón mayor las protestas de un grupo de socios de su Cofradía, que creen que las subastas no se controlan debidamente y que el marisco de peor calidad se mezcla con el bueno. "Cuando el marisco está caro nadie protesta, pero cuando está barato nadie está contento", indica Franco.

En los últimos días la abundancia de almeja y berberecho ya hecho que los precios de estos bivalvos bajen alrededor de un euro. Situación que no es plato de gusto para los que se ganan el pan en las mareas. Sin embargo, Fernando Franco está convencido de que la supervisión y parcelación de los trabajadores de la rula nada tienen que ver con ese desplome.

El patrón mayor niega también que los vehículos de la Cofradía estén siendo utilizados para limpieza de fincas u otras actividades particulares. Como también niega supuestas deficiencias en la limpieza de las instalaciones de la rula.

"Entre cien y doscientas personas pasan cada día por la lonja, es normal que los baños se ensucien", indica Franco. Aún así, asegura que al término de cada jornada todas las instalaciones se limpian, y al principio de cada jornada de trabajo están en perfecto estado de revista.

Hace unos días un grupo de socios de la Cofradía de Carril mostraba su descontento por la gestión del cabildo. Los críticos aseguraban que los actuales dirigentes no atienden debidamente los problemas del sector ni siguen el día a día de la rula.

En los últimos días los lotes de berberecho han salido de la lonja de Carril a 3 euros; en jornadas anteriores este bivalvo había alcanzado los 8 euros.

La tendencia a la baja también afecta a la almeja japónica, que no sube de los 5 euros cuando no es raro que esté en los 6.

Las condiciones de las mareas juegan un papel muy importante en la oscilación de precios; con secas muy grandes la cantidad de marisco que llega a la lonja es mayor; si el nivel del agua se mantiene más alto tan solo las mariscadoras de la agrupación local salen a faenar, lo que implica que el marisco, más escaso, se venda a unos precios más elevados en la subasta. Las últimas han sido jornadas de bastante abundancia en la rula carrilexa.