Dos ciclistas resultaban atropellados el pasado sábado con apenas diez minutos de diferencia en la PO-308, la misma carretera donde perdía la vida en abril pasado Jorge Vázquez Valcárcel al ser arrollado por un coche. Este vial se ha convertido en la "bestia negra" de los aficionados a la bicicleta por los frecuentes accidentes que se registran.
A raíz de los dos últimos casos, el colectivo Pedaladas dejó claro que "es necesario que la Xunta de Galicia intervenga sobre este vial antes de que se produzca otro muerto, es necesario que cambie el tratamiento de esta carretera que es una sucesión de travesías mal señalizadas, con limitación de velocidad superior a 50 kilómetros por hora, donde en sus márgenes están estacionados vehículos en lo que son arcenes transitables de uso obligatorio para los ciclistas pero debido a estos coches estacionados ilegalmente se convierten en totalmente intransitables".
La asociación, implicada en esta batalla desde hace años insiste en reclamar a Infraestruturas que "ejecute de forma urgente obras de calmado de tráfico, de mejora de la seguridad peatonal y ciclista, de humanización en los tramos con casas viviendas y deje de mirar para otro lado. Los usuarios de bicicleta estamos pagando con sangre, sufrimiento y miedo la lentitud de acción de las administraciones implicadas. Son muchos los usuarios de bicicleta que han dejado de usar esta carretera, única vía de acceso a la península de O Grove por la costa".
No obstante, no todas sus críticas apuntan a la Xunta y así hacen un "llamamiento a los agentes de la Policía Local de Poio, Sanxenxo y a la agrupación de Tráfico a que eliminen los estacionamientos ilegales en los arcenes transitables" y también exigen a los concellos una "mejor señalización de travesía, limiten la velocidad a 50 kilómetros por hora en los tramos urbanos, y señalicen correctamente los lugares donde si es legal estacionar".
"Instamos a las administraciones a reunirse y elaborar un plan urgente de acciones para mejorar la seguridad vial en la PO-308", concluyen.
