Pero más allá de la valoración al uso de los dos años de gestión del gobierno popular, Democracia Ourensana y el grupo Socialista reactivaron sus criticas , para ratificar la petición de dimisión de Jesús Vázquez como alcalde, después de tener conocimiento de las declaraciones relativas a que el Ministerio de Fomento y la Xunta podrían "dejar finiquitado" el proyecto de estación intermodal y la propia integración en la ciudad.

Los portavoces de los dos grupos de la oposición califican de "amenaza" el aviso dado por los responsables de las dos administraciones, Central y Autonómica, que trasladó el alcalde, además de advertir que son "muy graves".

Así, por parte de DO, Pérez Jácome acusa al alcalde de "ponerse de parte de la otra parte", y "tratando a los ourensanos como vulgares súbditos sin derechos". Para concluir que "con alcaldes así, no necesitamos enemigos".

Por su parte, Barquero califica las declaraciones del regidor municipal de "escandalosas", para denunciar "su incapacidad absoluta para defender el mejor proyecto para la llegada del AVE a la ciudad". Y recuerda que el anterior gobierno socialista "nunca se rindió para defender con uñas y dientes un tratamiento digno y no discriminatorio".