Catar se apresuró ayer a dar una respuesta a los cuatro países árabes que le presentaron una lista de exigencias para retomar las relaciones diplomáticas, rotas hace un mes, poco después de que se anunciara una prórroga del ultimátum. El Gobierno catarí volvió a rechazar la lista de imposiciones. Y lo hizo sin esperar a que el plazo de extra se agotara: Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Baréin concedieron una extensión de 48 horas del plazo de diez días que habían dado a Doha para ceñirse a sus demandas. La prórroga fue considerada por el cuarteto como un "periodo de gracia" después de que Kuwait, país mediador en la crisis, les comunicase la intención del emir catarí de dar una respuesta formal a sus peticiones.