El sector del cerco del sur de la comunidad está sorprendido: la apertura de la campaña de la sardina el martes está dejando capturas no esperadas. Los buques salieron de puerto con pocas esperanzas de dar con la especie, sobre todo porque no es la época, y se llegaron a encontrar sardina hasta en el entorno de las Islas Cíes. "Personalmente me llevé una sorpresa porque no se miraba ni una sardina por ningún lado y justo el día que se abre la pesquería nos la encontramos", ilustra José Manuel Saavedra, presidente de la Asociación Provincial de Armadores de Buques de Cerco de Pontevedra y patrón del Colomba Tercero. Junto a otros buques del puerto de Vigo, salió a faenar para pescar también "algo de chincho y boga". Sin embargo, precisamente porque "la gente aún no la quiere", el precio de la sardina es muy bajo: un euro el kilo.
Con un tope de 3.000 kilos de esta especie a la semana el sector intenta capear el temporal, consiguiendo cubrir los gastos un día sí y un día no. "Hacemos poco pero tenemos que salir igualmente", explica resignado Joaquín Iglesias, armador del Ostra Segundo, que lleva algo más de dos semanas trabajando. En la noche del martes para el miércoles este buque logró unas 60 o 70 cajas de sardina, pero Iglesias recuerda que "el primer día fuerte es San Antonio", en junio.
Roberto Crespo, patrón del Novo Baloeiro, indica por su parte hay sardina incluso dentro de la Ría pero que son muchos para pescarla. "Se pueden coger unas 80 cajas, pero están muy flacas y se paga muy barata", comenta Crespo, que añade que la caja estuvo en torno a 11 euros por la mañana.
Crespo coincide con Saavedra al explicar que estos "son meses aún críticos, de comienzo". "En una semana puedes cubrir bien los gastos o no. Ahora lo importante es que vaya apareciendo algo y guardar toda la cuota posible, porque si un día coges 100 cajas de sardina ya te puedes pasar de la cuota semanal", relata.
El presidente del cerco de Pontevedra matiza que aunque sí se han encontrado sardina, sería "preocupante" que la situación fuese igual en verano.
