El acuerdo entre el Círculo Mercantil y el Liceo Marítimo de Bouzas para compartir instalaciones tendrá que esperar, al menos un mes. Aunque la directiva boucense confiaba en cerrar el acuerdo en breve y sin votación, las "reticencias" que ha mostrado parte de sus socios durante la asamblea de ayer -en la que se informó de las gestiones- le han llevado a decidir someterlo al visto bueno de los afiliados.

El presidente del Liceo, José María Martínez Bosch, explica que la entidad de Bouzas celebrará una votación dentro de un mes en la que sus socios decidirán si aceptan o no el pacto.

Bosch confía en que la firma con el Mercantil salga adelante, pero ha decidido someter la decisión a las urnas ante las "reticencias" mostradas por una parte de la masa social durante la asamblea de anoche. A la cita acudieron unos 50 afiliados. El Liceo sumaría en total cerca de 283.

El convenio perfilado por ambas directivas contempla que los socios del Mercantil puedan usar una planta de 300 m2 en la sede que el Liceo tiene en Bouzas. A cambio, el Círculo le pagaría 700 euros mensuales por los gastos generados. Desde ambas directivas se insiste en que no es un alquiler, sino un convenio de cesión para el uso de espacios. Tanto una como otra junta rectora insiste en que el acuerdo no contempla en ningún caso la fusión de las dos sociedades, que mantendrán su independencia.

El pacto prevé que los miembros de cada entidad puedan acceder a los servicios de la otra, pero abonando siempre una tarifa que todavía está por definir.

La asamblea se saldó además con la aprobación de las cuentas del Liceo. Bosch apunta que el presupuesto ronda los 500.000 euros y los beneficios oscilan entre el 7 y 8% de esa suma, por lo que se situarían en 35.000 euros. Los socios dieron luz verde a la construcción de 14 nuevas plazas de amarre para embarcaciones de entre 12 y 14 metros de eslora. En total, la entidad prevé invertir unos 90.000 euros en la marina.