Luz verde para que el Náutico pueda usar sus instalaciones de Nigrán como garantía de la deuda con Abanca. Los accionistas de la S.A. del Náutico dieron esta tarde su visto bueno al club para poder hipotecar la finca de A Barcalleira, un amplio terreno del que dispone en Nigrán, con instalaciones deportivas y de ocio. La operación recibió el apoyo de 252 accionistas, frente a los 119 que votaron en contra. Otros seis se abstuvieron. La decisión de la junta de la S.A. permite al club avanzar en las negociaciones con Abanca, su principal acreedora -le debe 2,2 millones de euros, según la auditoría del administrador concursal-.

El respaldo de la S.A. era clave ya que el banco exigía, como requisito, que A Barcalleira avalase la deuda que mantendrá el club tras aplicarse la quita. Por esa razón esta misma semana el presidente del Náutico, Justo González Ballesta, insistía en la importancia de que acudiese el mayor número de integrantes de la S.A. "Queremos un respaldo mayoritario", anotó entonces. La asamblea arrancó con una hora y media de retraso, sobre las ocho y media de la tarde. A la sede de As Avenidas asistieron solo 40 accionistas, aunque gracias a las delegaciones de votos en total estaban representados 370. La cita acabó una hora y media después, sobre las diez de la noche.