Los grupos municipales del PP y de la Marea de Vigo trasladaron su apoyo a los trabajadores del Aero Club e instaron al Concello a que actúe como mediador en el conflicto que mantienen con la Comunidad de Montes de Cabral. "Es responsabilidad del alcalde escuchar a los vigueses que tienen problemas. Y más cuando afecta a una institución importante que lleva tantísimos años en Vigo" señaló Elena Muñoz, portavoz popular. Además exigió que el regidor olívico "atienda a los trabajadores directamente" y "sirva de interlocutor" en la problemática para garantizar la viabilidad del club.

El portavoz de la Marea de Vigo, Rubén Pérez, indicó que las condiciones de utilización por parte del Aero Club de los terrenos de los comuneros son "absolutamente perjudiciales para los intereses de la parroquia" y remarcó que el presidente de la comunidad de montes "no puede estar jugando con los empleos de 25 familias".

"Lo que pagaban hasta diciembre era absolutamente insuficiente, pero lo que se pone encima de la mesa ahora puede suponer el cierre y el despido de los trabajadores. Pedimos un poquito de mesura", explicó Pérez, que insistió en que no se puede imponer "la interpretación arbitraria de un presidente de una comunidad de montes que funciona como promotora inmobiliaria".

El personal del Aero Club, que lleva semanas movilizándose por distintas zonas de la ciudad para pedir apoyo ante este conflicto, volvió a advertir que "25 familias" corren riesgo de quedarse sin trabajo porque al precio que reclaman los comuneros "la viabilidad del club sería imposible".

"Lo que nos preocupa es que se está acercando mucho el plazo y es una incertidumbre para los trabajadores y una problemática para el club, que está perdiendo socios", aseguró David Blanco, delegado de personal.