Las vísperas de Reyes y Nochebuena, la Shopping Night, los primeros días de las rebajas de invierno y verano... Y el Black Friday. El bautizado como "viernes negros" se cuela, y con una fuerza mayúscula, impensable hace solo un par de años, en el pódium de las citas más rentables para el comercio. Los jugosos descuentos que aplicaron ayer las tiendas de la ciudad animaron a los clientes a sacar la cartera y adelantar algunas compras de Navidad o renovar su armario con ropa de invierno. Víctor Fernández, presidente de la Federación de Comerciantes de Vigo (Fecovi), calcula que, de media, los establecimientos facturaron un 30% más que un viernes convencional. En la calle Príncipe el éxito del Black Friday fue también notable. El gerente de Centro Príncipe, Enrique Núñez, anotaba a media tarde que su previsión era que las ventas superasen en un 18% a las de la edición del año pasado, cuando ya se habían disparado a su vez un 24% con respecto al primero año en el que celebraron el "viernes negro".

"Estoy muy satisfecho. Ha sido un éxito", reconocía Núñez, quien a modo de ejemplo describe la estampa que se vivía ayer a las ocho de la tarde en Príncipe: una riada de personas con bolsas, las tiendas repletas de actividad e incluso el parking de Urzáiz al borde de quedarse sin plazas libres. "No es ya que se consolide el Black Friday, sino que se comprueba que es impensable no sumarse a él", reflexiona el gerente de Centro Príncipe. Y apoya sus palabras con un dato: para sus establecimientos el "viernes negro" es ya la segunda cita con más ventas del año, solo por detrás de la víspera de Reyes, cuando las tiendas se saturan enero tras enero con las compras de última hora.

Aunque ayer a última hora aún no disponía de los datos definitivos de facturación, Núñez explica que en la Shopping Night -otra de las citas de referencia para la "milla dorada" de la ciudad- las tiendas facturan cerca de un millón de euros. La diferencia con respecto al Black Friday es que la Shopping dura solo cuatro horas y la promoción de ayer se prolonga todo el día. Es más, muchos de los 200 negocios de Centro Príncipe ampliaron su horario hasta las diez de la noche. En algunos, ya por la mañana y pese a los refuerzos, se veían colas.

Fernández también reconoce el éxito de la jornada y aunque apunta que en el resto de la ciudad no se puede hablar de la segunda cita más rentable del año, sí concluye que el Black Friday se ha convertido en "uno de los días del año con más facturación". "Ha ido bien, sobre todo en las tiendas de calzado porque hasta ahora, por el tiempo, se había vendido muy poco de invierno", explica. Para el responsable de Fecovi ayer se alcanzó un nivel de ventas similar al de la víspera de Nochebuena. Para continuar con esos buenos resultados, algunos locales, tanto de Príncipe como del resto de Vigo, mantendrán hoy sus rebajas, que rondan entre el 20 y 50%, aunque en algunos casos alcanzaron incluso el 70%.

Centros comerciales

A principios de semana el sector calculaba que se sumarían al Black Friday unos 700 comercios, aunque ayer apuntaban que algunos habían decidido sumarse a última hora. Entre los que apostaron de forma decidida por la jornada figuran centros comerciales como Gran Vía -que abrió hasta medianoche-, Camelias, Plaza Elíptica o el área comercial Meixueiro. Los clientes saludan el aterrizaje en Vigo del Black Friday con entusiasmo. Roque Portela, por ejemplo, comenta que "es una idea muy buena que debería repetirse más a menudo, como ocurre con la Semana del Cine". De opinión similar, Alba Menduiña anima a que vuelva a apostarse por la cita. "Es como unas mini rebajas que movilizan al cliente", comenta Gonzalo Durán.