El fiscal solicita 8 meses de prisión para una joven ucraniana, O.K., a la que atribuye un delito de desobediencia al acusarla de incumplir el régimen de visitas establecido por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo a favor de su exmarido con la hija menor de ambos. La defensa negó los incumplimientos y señaló que en todo caso están amparados por el "riesgo" que esta madre percibe para la menor, ya que su expareja fue condenado en dos ocasiones por violencia de género. "Debe elegir entre cumplir una resolución o evitar un mal para ella y sobre todo para su hija", alegó la abogada, que considera que por este motivo concurre la eximente completa de estado de necesidad.

La Fiscalía sostiene que de mutuo acuerdo entre las partes el juzgado estableció el régimen de visitas entre el padre y la menor. Y que pese a conocer "la obligación impuesta", la madre no hizo entrega de su hija el 15 de agosto de 2015 para que pasase dos semanas con el hombre, ni se presentó en el punto de encuentro estipulado para el régimen de visitas que se estableció desde septiembre.

Sobre el hombre pesan dos condenas firmes por violencia de género a su exmujer. En otros casos fue absuelto. Hubo más juicios y denuncias. Él alega que fue sentenciado por "denuncias falsas", pero la abogada de la mujer hizo hincapié en la "agresividad" del hombre hacia su cliente y la pareja actual de ella. Tras señalar que hay ya una solicitud de medidas urgentes para que se suspenda el régimen de visitas a favor del padre, añadió que en ocasiones en que la menor estuvo con él regresó "nerviosa", "con ropa sucia y piojos" y "problemas de sueño".