Ataque vandálico a la exposición 'Vigo Sonríe' en Príncipe. // Instagram

"Yo ya rompí dos, tío". Con esta frase y total despreocupación responde al amigo que los graba uno de los vándalos que destrozaron durante el puente la exposición Vigo SonríeVigo Sonríe. Con la mano en los bolsillos y fumando, el joven al que se ve dar un puñetazo y romper al menos dos de las inmensas fotografías de Javier Teniente se ríe de lo ocurrido mientras un tercer acompañante vestido con camisa de cuadros y gorra asiste impasible a la dantesca escena.

El vídeo apenas dura 15 segundos y fue colgado en una cuenta privada de Instagram para jactarse de los destrozos, pero horas después el usuario que compartió la escena del ataque borraba no solo las polémicas imágenes, sino todo el contenido de la misma.

En la escena que podía descargarse ayer se ven perfectamente los rostros tanto del joven que rompe las imágenes como de su compañero. Ambos vestidos con ropa deportiva. En el vídeo se aprecia que es de noche pero no hay ningún indicio que indique la hora. No obstante, sí puede verse a más viandantes por la zona, lo que no les impide continuar dañando la exposición.

"Una más, venga va", le insiste el que graba la escena al autor del puñetazo. Se lo repite por segunda vez y es la persona que está detrás del objetivo el que señala la instantánea que habría de dañarse: "a la niña gorda, a la niña gorda", se le oye decir en alusión al retrato de una pequeña sonriendo que se da un baño en una piscina.

Aunque al autor de los daños se le escucha reconocer que ya había roto dos paneles antes de su tercer ataque, se desconoce si continuaron rompiendo más fotografías sin que haya constancia gráfica.

Los casi 90 paneles rotos permanecieron hasta ayer por la tarde a medio arrancar en la calle Príncipe, pero ya han sido retirados y a última hora solo quedaban los soportes metálicos de los que colgaban los retratos de Teniente. El alcalde, Abel Caballero, avanzó ayer por la mañana que se iba a retirar la exposición antes de tiempo por considerar que ya no es recuperable: "Estaba prevista hasta finales de mes, pero debido a los daños tan severos que ha sufrido la vamos a suspender porque solo el tiempo de reparación ya superaría el tiempo previsto para exponerla", argumentó.

Operarios desmontan los soportes metálicos de los que colgaban las instantáneas. // Marcos Canosa

Respecto a los actos vandálicos sufridos durante el puente en Príncipe y las señales de tráfico arrancadas en Churruca y María Berdiales, el alcalde apuntó que se trata de "sujetos aislados" y apostó por seguir trabajando "sin sacar conclusiones precipitadas". Tras ver la acción despreocupada de los atacantes en el vídeo, el regidor anunció "una investigación a fondo para dar con todos los responsables". "Tolerancia cero con ellos", zanjó a la espera de que se produzcan avances en las pesquisas.

Los partes de la Policía Local del fin de semana revelan que tras el primer ataque la madrugada del sábado en el que desaparecieron media docena de paneles, los agentes realizaron la noche del lunes hasta tres rondas por la calle Príncipe y sus aledaños para intentar disuadir a los vándalos, sin éxito.

Se le encomendó a un grupo la vigilancia de los paneles fotográficos y la primera ronda del lunes se realizó a la 01.00 de la madrugada. A esa hora ya solo 20 fotografías seguían en pie. Fuentes municipales confirman que en una nueva supervisión a las 05.00 de la mañana se localizó a tres jóvenes, dos menores, rompiendo otro panel, por lo que se informó a las familias y se redactó un parte. Estos tres son los únicos identificados hasta el momento. Los agentes destinados a la zona realizaron una nueva pasada a las 05.45 y ya solo quedaban 15 de las 90 imágenes intactas. Pero tanto a estos últimos como a los autores del primer ataque del sábado todavía se les está buscando.

Javier Teniente ya reconoció a FARO que se replantearía volver a participar en una exposición en la vía pública y Caballero reconoció ayer que para próximas iniciativas habrá que buscar "fórmulas que permitan interaccionar con las obras pero sin que un demente pueda hacerles tanto daño".