Además de la supramunicipalidad para los proyectos de grandes infraestructuras también existen vías para desbloquear otros ámbitos del Plan Xeral y evitar retrasos de años en su desarrollo, según señalan los expertos consultados.

Con el documento de 2008 anulado vuelve a entrar el vigor el de 1993, origen de muchos de los graves problemas urbanísticos que sufrió la ciudad durante las últimas dos décadas, en las que más de 2.000 viviendas fueron declaradas ilegales y corrieron serio riesgo de derribo. El Concello, indican las citadas fuentes, podría impulsar modificaciones puntuales del Plan de 1993 que abrirían el camino a urbanizaciones que han quedado paralizadas por la sentencia y cuyos planes estaban muy avanzados o aprobados,

Entre estas destaca la del Barrio do Cura, principal operación prevista en el Casco Vello. Su promotor, el exfutbolista Valery Karpin, proyecta transformar la zona con la construcción de 350 viviendas, un centro comercial, una plaza pública y la ampliación del mirador del Paseo de Alfonso, entre otras actuaciones. El plan especial está aprobado si bien la urbanización permanece paralizada por problemas de financiación que, según señalaron recientemente sus promotores, estaban en vías de resolverse.

También se evaluará cambiar el Plan de 1993, según las fuentes consultadas, en Tomás Paredes, un ámbito al que solo le faltaba la aprobación del proyecto de urbanización para el inicio de la construcción de 120 viviendas entre Coia y Bouzas.