La estatua de Manuel Castro, el popular vendedor callejero de FARO, vuelve a lucir entera en Príncipe. Tras varios días en el taller, la famosa escultura recuperó su brazo derecho, su dedo y , sobre todo, su periódico.
Los actos vandálicos se han cebado con la obra de Jandro Rodríguez desde su colocación a finales de 2011. Tres fueron las veces que su autor tuvo que reconstruirla tras los destrozos y robo del periódico e incontables las pintadas que ha sufrido en estos cuatro años.
Todos estos daños obligaron al Concello a tomar cartas en el asunto y por ello, desde Ayuntamiento y Gobernación Civil se han comprometido a colocar dos cámaras de seguridad que vigilen y garanticen la integridad de la escultura. De esta forma, cualquier otro vándalo que quiera estropear o pintarrajear la obra de Castro podrá ser identificada por la Policía y su acto no quedará impune.
Estas medidas llegan algo tarde a idea de su creador,Jandro Rodríguez, que cedió la obra a Patrimonio, se siente "cansado de tener que arreglarla cada dos por tres y también apenado, porque al fin y al cabo no deja de ser un regalo que le hago yo al Concello y siento que no han sabido protegerla bien". Rodríguez celebra la iniciativa de las cámaras, ya que las otras soluciones que se plantearon, como subirlo a un pedestal, vallarlo o cambiarlo de sitio no eran de su agrado. "Quiero creer que esta será la definitiva, la última vez que tendré que reparar a Castro". El vigués, que quiso estar presente en la colocación definitiva del brazo de su creación, no dudó en calificar estos destrozos como una atentado grave contra el patrimonio. "Me duele porque es una obra que he creado yo pero también porque es una escultura de Vigo y no hay razón para dañarla, al igual que el resto, como vemos el Dinoseto también sufrió actos vandálicos, hay que respetar las figuras públicas", añade Rodríguez.
Entre los arreglos que realizó a la obra, destaca el reforzamiento del dedo al periódico, con una soldadura mucho más fuerte. Los viandantes no dejaron de agradecer a Jandro Rodríguez el trabajo hecho con la estatua del vendedor de periódicos más famoso de Vigo. "La gente se paraba a felicitarnos, que por fin volvía a estar bien, que que alegría. Es una seña a la que la gente le tiene mucho aprecio y esperemos que se trate como debe", añade el escultor.
Todo por una promesa
Que veamos al Manuel Castro de bronce igual que la primera vez que se ancló a la calle Príncipe el 24 de diciembre de 2011es producto de un pacto entre Jandro Rodríguez y el Concello.
"Yo ya no quería repararlo más veces, ya estaba harto, desde que lo cedí a Patrimonio ya no es cosa mía y de verdad que no quería volver otra vez a restaurarlo, pero se me prometió colocar una fuente en honor a un gran amigo mí como fue Xosé Guillermo en Avenida de Florida así que yo accedí a recomponer la estatua", explica el vigués.
Pasaron unos meses desde que el vendedor de Faro más grande y pesado del mundo (300 kilos) perdiera su brazo derecho a manos de unos vándalos. Desde ese momento, la Diputación de Pontevedra decidió 'cortar de raíz' y 'amputó' dicha extremidad para reforzarla. Esto junto con las cámaras de seguridad que se instalarán en la entrada de Príncipe para su vigilancia, debería ser suficiente para evitar nuevas roturas y robos de 'falanges' y diarios.
