La empresa de gestión de residencias para mayores Intercentros Ballesol S.A., que acaba de cerrar la compra a la Sareb del solar del antiguo colegio San José de Cluny, ya tiene definidas las características del futuro geriátrico vigués, que estará dotado con 110 camas y en el que invertirá nueve millones de euros de acuerdo a la información publicada ayer en el portal económico Alimarket pocas horas después de que FARO revelase la operación inmobiliaria en la parcela emplazada en plena Gran Vía.
Ballesol tiene despejado el camino para el derribo del antiguo centro educativo, un inmueble que data de 1929, tras haber resuelto la comisión del Plan Especial de Edificios a Conservar que carece de valor que justifique su protección. La residencia, que será la tercera en Galicia de la compañía -sumándose a la de Poio, de 135 plazas, y el de Oleiros (A Coruña), de 212- tendrá prácticamente los mismos metros edificables que el colegio, 4.600, distribuidos en bajo y tres plantas. De las 110 camas el 80% estarían en habitaciones individuales, según el citado portal, y las instalaciones contarían con todos los servicios para prestar atención asistencial a los usuarios.
La compañía aún no ha presentado el proyecto en el Concello y debe obtener las licencias para la demolición del antiguo colegio y la construcción del nuevo edificio. En todo caso confía en que pueda agilizar la tramitación urbanística y arrancar en el primer trimestre de 2015 las obras. De cumplirse su calendario la residencia de mayores abriría sus puertas a finales de 2016, ya que el plazo de ejecución está estimado en año y medio.
Ballesol, que gestiona 44 establecimientos en España con 6.800 plazas, ha apostado fuerte por Vigo al elegir un solar emblemático en el corazón de la ciudad por el que hace ocho años el exfutbolista y promotor Valery Karpin pagó 17,5 millones para construir una urbanización residencial y comercial y después fue subastado por Caixanova ante el impago de la financiación. Los terrenos pasaron en 2012 a manos de la Sareb, el llamado banco malo, y ni la entidad ni Ballesol han revelado el montante de la operación de compra que acaba de cerrarse, a la que se une la inversión prevista en la obra nueva.
Los centros de Poio y Oleiros están situados en las afueras de ciudades mientras que el proyecto de Vigo encaja con la nueva estrategia de la compañía de expandirse en lugares céntricos. Actualmente tiene en marcha otro proyecto para abrir un geriátrico en Sevilla con seis millones de inversión. La sociedad cerró el ejercicio de 2013 en números positivos, con 3,9 millones de beneficios netos, un 50% más que en 2012.
